La sede que la asociación de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales de Euskal Herria Gehitu tiene en la calle Arrasate número 51 de Donostia sufrió en la madrugada del pasado domingo un nuevo ataque, el tercero en un mes. Dos hombres aún sin identificar rompieron los cristales del portal, valiéndose, al parecer, de retrovisores metálicos arrancados a varias motos estacionadas en las inmediaciones. Los hechos tuvieron lugar en torno a las 2.15 del domingo, cuando un vecino alertó del ataque.

A raíz del aviso, la Ertzaintza se desplazó al lugar, donde tomó declaración a las personas que habían presenciado los hechos y recabaron huellas, que se unirán a las grabaciones que varias cámaras de edificios públicos puedan tener y que servirán para identificar a los autores de la agresión homófoba.

Ayer, la presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Rafaela Romero, condenó los «reiterados ataques y amenazas» a Gehitu, asociación a la que animó a «seguir en su lucha por la no discriminación y por una convivencia más democrática».

«Los demócratas que estamos agradecidos del trabajo que Gehitu y otras asociaciones han realizado por lograr una sociedad mejor y con más igualdad y justicia, nos sentimos también agredidos por los descerebrados que sean autores de los ataques», afirmó Romero.

A su vez, el secretario de la Ejecutiva de Movimientos Sociales del PSE en Gipuzkoa, Oscar Renedo, pidió «que se pongan todos los medios» para evitar nuevos ataques contra la sede de Gehitu. «Hay que erradicar estos actos de la vida cotidiana de muchos hombres y mujeres», subrayó, antes de incidir en la importancia del trabajo que realiza la asociación por la diversidad sexual.