Se suceden los ayunos solidarios mientras la dispersión provoca otro accidente
Multitud de personas de toda Euskal Herria secundan a lo largo del fin de semana o durante 24 horas una huelga de hambre, mostrando así su solidaridad con el ayuno que emprendieron la semana pasada los integrantes del Colectivo de Presos. Por otro lado, el padre de Jon Zubiaurre tuvo que ser operado a causa del accidente de tráfico que sufrió ayer mientras se dirigía a la cárcel de Badajoz para visitar a su hijo.
GARA |
Multitud de personas de diferentes localidades de Euskal Herria han secundado durante 24 horas, o durante todo el fin de semana, una huelga de hambre, con el objetivo de denunciar «la dura situación» que sufren las presas y presos vascos. Además de los ayunos se han celebrado concentraciones, cadenas humanas o se han repartido folletos informativos entre la gente. Mientras, la dispersión forzó otro accidente de familiares. En este caso, fueron los allegados del donostiarra Jon Zubiaurre los perjudicados. Su padre tuvo que ser operado por la tarde.
En Eibar doce personas se reunieron el viernes en el Ayuntamiento para iniciar así un ayuno que se prolongará durante tres días. Tal como indicaron los participantes, quieren mostrar su «total apoyo» a los presos y presas vascas. En Arrasate, tras celebrar una concentración donde se reunieron más de 300 personas, 35 personas iniciaron el ayuno. Por la noche hicieron un poteo por el pueblo aunque con el agua como única bebida.
También en Arrigorriaga secundan una huelga de hambre de tres días instalando para ello una tienda de camping en la plaza Argala. En el caso de esta localidad, cabe destacar, según los participantes la actitud del Consistorio: «El alcalde no nos permitió realizar el ayuno dentro del Ayuntamiento, dejándonos para ello en la calle, con todo lo que ello supone: lluvia, frío, viento...». En Baztan cinco personas comenzaron el sábado una huelga de 24 horas en el Ayuntamiento: «A pesar del permiso que nos otorgaron, agentes de la Guardia Civil nos vigilan desde fuera y nos han ordenado desalojar, a lo que nos hemos negado, por supuesto», cuenta una mujer.
En Donostia, un grupo de 30 personas secundan la iniciativa de EPPK durante el fin de semana. Al mediodía celebraron una concentración donde se congregaron más de cien personas.
Pierna fracturada
Por otro lado, el movimiento pro amnistía informó a GARA del accidente que sufrieron ayer la hermana y el padre del preso altzatarra Jon Zubiaurre. Ambos se dirigían en coche a la cárcel de Badajoz para realizar la visita correspondiente. La hermana, según relató esta misma fuente, resultó herida de manera leve, pero el padre tuvo que ser hospitalizado para ser operado de la pierna, la cual tenía «totalmente fracturada».
Se siguen celebrando movilizaciones en solidaridad con los prisioneros en diferentes localidades. Es el caso de Algorta, donde se congregaron 43 personas, Santurtzi -100- o Arrigorriaga -50-. El viernes, en Hendaia se concentraron 30.
Una vez más, la política penitenciaria ha dejado a varios presos sin «vis a vis». En la cárcel de Almería, Olatz Egiguren lleva seis meses sin ver a su hija, ya que se niegan a someterse a los «humillantes» cacheos, el mismo motivo por el que Juan Carlos Balerdi ayer no puedo ver a su hermana.
