Zdenek Stybar (24 años) cumplió los pronósticos que le situaban como gran favorito y no dejó escapar el oro en su tierra. El checo superó en el Campeonato del Mundo de Tabor a los corredores flamencos, aunque Klaas Vantornout fue segundo y Sven Nys tercero. El balance de los vascos fue malo, con Ruiz de Larrinaga 45º, a 6.19, y Egoitz Murgoitio retirado.

El Mundial fue una batalla entre la selección checa y la belga, con tres grandes favoritos en la salida: Stybar, Nys y Albert. Los dos primeros cumplieron, todo lo contrario que el defensor del título, que abandonó.

El circuito se presentaba blanco y helado y los participantes tenían que hacer mil piruetas para no irse al suelo. Stybar fue el más habilidoso en un circuito técnico y, pese a algún problema en su bicicleta, remontó y se alzó con el triunfo final.

El checo salió en tromba pero un problema mecánico le retrasó. Un compañero de selección le esperó y le ayudó a entrar en el grupo delantero. La selección belga no supo aprovechar la situación y nada más llegar a cabeza, Stybar cambió el ritmo y dijo adiós a sus rivales.

Nys, que cometió varios fallos, Vantornout y Bina se situaron a continuación. Los tres se pelearon por la plata y el bronce, ya que desde mitad de carrera Stybar no hizo sino acumular segundos a su favor para delirio de los aficionados locales.

Incluso soñaron con el doblete, ya que Bina luchó hasta el final contra Vantornout y Nys. El primero aprovechó un nuevo resbalón de su compañero y se situó segundo.

Nys, sin embargo, tuvo que luchar hasta el final con un correoso Bina. Al sprint, el veterano campeón flamenco puso las cosas en su sitio y cosechó su tercer bronce mundialista.

El francés Mourey, quinto, el checo Zlamalik, sexto, y el suizo Heule, séptimo, realizaron un gran Mundial, aunque se quedaron sin una medalla que tuvieron muy cerca.

Stybar saludó alzó los brazos proclamándose por primera vez campeón élite, tras dos medallas de plata en 2008 y 2009 y dos campeonatos sub 23.