Caja Vital cerró el pasado ejercicio con un beneficio neto consolidado de 68 millones de euros, lo que supone una reducción del 10% respecto al año anterior, según informó ayer la entidad financiera.

La caja alavesa destaca, en la nota de prensa, que, a pesar de la caída, ésta es la segunda menor en el Estado español, detrás de Caja Asturias, y apunta que se mantiene en la quinta posición en solvencia y fortaleza financiera, pese a ocupar por dimensión el puesto 32 de un total de 45.

Caja Vital también subraya en su escrito la contención del índice de morosidad, que quedó fijado en el 3% a finales de año, por debajo de la media del sector de cajas, situada en el 4,91%. Asimismo, explica que los créditos a la clientela llegaron a los 6.967 millones de euros.