Tras los siete encarcelamientos
Otros dos ondarroarras detenidos por la Ertzaintza en Berriatua y Jaca
Con otras dos detenciones llevadas a cabo ayer en Berriatua y Jaca, ya son nueve las personas detenidas en la operación policial iniciada por la Policía autonómica el pasado martes en Gipuzkoa y Bizkaia. Poco antes, los ondarroarras Alkorta y Bedialauneta, arrestados el jueves, fueron enviados a prisión. Posteriormente, el magistrado habría ordenado levantar la incomunicación a ambos y a los otros cinco encarcelados, pero aún no ha trascendido cuál es su situación exacta.
GARA | DONOSTIA
Ayer por la tarde, la Ertzaintza arrestó a una mujer y un hombre, ambos ondarroarras, dentro de la operación policial iniciada el pasado martes en Lea-Artibai. Según fuentes oficiales, se trata de Olaitz Lema, de 27 años, arrestada sobre las 18.00 en Berriatua, y de Igor Martín Niño, de 31, detenido por la Ertzaintza en colaboración con la Policía española en Jaca (Huesca).
Con el arresto de estos dos ondarroarras por orden de la Audiencia Nacional española, ya asciende a nueve el número de detenciones llevados a cabo por la Ertzaintza en el marco de esta operación.
Lema fue detenida en su lugar de trabajo, en el polígono Gardotza de la localidad vizcaína de Berriatua, presuntamente por «realizar labores de colaboración con el grupo desarticulado en Ondarroa». Sus compañeros de trabajo informaron que los agentes no mostraron ninguna orden de detención.
Por su parte, a la misma hora y con la ayuda de la Policía española los agentes de la Ertzaintza arrestaron a Martín en Jaca, lugar donde reside. A continuación los agentes registraron su domicilio, situado en las afueras de la localidad aragonesa.
Mientras tanto, en Ondarroa un centenar de personas se reunieron en el barrio de Kamiñazpi, donde viven familiares de los arrestados, y exigieron su puesta en libertad.
Siete ya en prisión
En cuanto a los dos ondarroarras detenidos el jueves por la tarde, Zunbeltz Bedialauneta y Urtza Alkorta, éstos ingresaron ayer en prisión por orden del juez de la Audiencia Nacional española Eloy Velasco.
Después de permanecer cinco días incomunicados en manos de la Ertzaintza, comparecieron ante el juez bajo esta misma medida. Fue pasadas las 16.30 de la tarde cuando el magistrado habría ordenado levantar la incomunicación de Bedialauneta y Alkorta, al igual que a los otros cinco arrestados el martes. Casi simultáneamente se produjeron los dos nuevos arrestos.
El magistrado del tribunal especial acusó a Bedialauneta de «integración en banda armada», mientras que a Alkorta le imputó un delito de «colaboración continuada con ETA». Concretamente, liga al primero al atentado «perpetrado en un polígono industrial de Ávila en setiembre de 2005». También le acusaría de haber ayudado a tres presuntos miembros de ETA a pasar al Estado francés. Así atendió el juez Velasco la petición de la fiscal, Teresa Sandoval, que también les imputaba «tenencia» y «depósito de armas».
En concreto, Velasco atribuye a los apresados su participación en cinco acciones, entre ellas los atentados contra la comisaría de la Ertzaintza en Ondarroa en setiembre de 2008, ataques contra la maquinaria de las obras del TAV en Orio y Urnieta, la voladura de un repetidor de televisión en Azpeitia y el atentado perpetrado contra la sede del PSOE en Elgoibar.
Los otros cinco arrestados el martes -Asier Badiola, Ibon Iparragirre, Jon Iñaki Esnaola, Xeber Uribe y Jabi Zubizarreta- fueron enviados a la prisión de Soto del Real el sábado, por lo que han permanecido incomunicados durante ocho días. Ayer por la mañana los familiares de Uribe y Badiola se habían desplazado hasta la prisión madrileña para llevarles ropa. Aun así, no les permitieron la entrega argumentando que estaban incomunicados. Anoche no había todavía datos sobre la situación que han atravesado.
Mientras, en Bilbo se concentraron 125 personas por los presos vascos ante el Arriaga, como cada martes.
Desde el movimiento pro-amnistía anunciaron que se celebrarán nuevas movilizaciones en Ondarroa mientras permanezcan incomunicados los últimos dos detenidos.