Un alegato a favor de las gordas de barrio
«Precious»
Es la película más premiada del año, una producción independiente de diez millones de dólares que ha conseguido colarse entre las favoritas de los Óscar con seis nominaciones. Es un duro melodrama social de gran repercusión popular, aunque el realizador Lee Daniels tuvo que aligerar el contenido del libro de Sapphire para que en la pantalla no resultara excesivo.
Mikel INSAUSTI | DONOSTIA
Siempre he pensado que para ser un productor independiente de éxito hay que ser mucho más listo que los que trabajan para los grandes estudios. Lee Daniels ha sabido hacerse un sitio dentro de la industria con productos arriesgados, más aún desde que obtuviera dos Oscar con «Monster's Ball». Sabe manejar temas sociales orientados hacia la polémica, y prueba de ello es «El leñador», una de las más interesantes aportaciones cinematográficas al espinoso debate de la reinserción.
Ser productor tiene sus ventajas, porque no hace falta dar tanto la cara como cuando se pasa a la dirección. Lee Daniels tuvo un primer intento fallido en la realización con «Shadowboxer», portagonizada por una Helen Mirren que deja en segundo plano a Cuba Gooding Jr. No gustó al público afroamericano, que le reclamaba una película más comprometida para con los suyos. Con la llegada de Obama a la presidencia iba ya siendo la ocasión perfecta para hacer esa película sobre los problemas de la comunidad negra más marginal.
La prioridad que tuvo en mente Lee Daniels cuando comenzó la adaptación de la novela de Sapphire «Push» fue ganarse la confianza de los espectadores de raza negra en los Estados Unidos. Para ello buscó a un padrino y una madrina de excepción, que se encargarán de recomendar a su gente la película. Por supuesto, pensó en Oprah Winfrey, que es la comunicadora afroamericana con mayor poder mediático. No cabe duda de que con su apoyo se apuntó un tanto decisivo, por tratarse de una mujer muy respetada. El follón vino con la elección del padrino, ya que solicitó el respaldo de Tyler Perry, que es el rey de la comedia de consumo masivo entre la población afroamericana. Como quiera que Tyler Perry es muy atacado por los intelectuales de su misma raza, en especial por el siempre beligerante Spike Lee, su intervención fue vista como una bajada de pantalones, y de ahí las dudas generadas por «Precious» entre los más críticos.
Sobrevivir en Harlem
Los primeros ataques iban dirigidos hacia la adaptación de la novela, que es todo un fenómeno literario y, tal como suele suceder invariablemente en estos casos, iba a ser mirada con lupa. El primer título de la película, antes de llamarse «Precious», incluía el «Push» del texto original más la refencia a la autora del libro. Es decir, que inicialmente el nombre de la poetisa Sapphire pesaba mucho en el ánimo de Lee Daniels.
Bajo el alias artístico de Sapphire se esconde Ramona Lofton, que fue trabajadora social y profesora de adultos en el barrio de Harlem. Su experiencia con alumnos marginales está volcada en «Push», describiendo una casuística que a Lee Daniels le pareció excesiva para ser llevada a la pantalla sin ser tachado de cargar las tintas en las injusticias sociales de lo que sigue siendo a todos los efectos el mayor gueto de Nueva York.
Lee Daniels ha intentado aligerar en lo posible las caracterizaciones marginales, para salvar su credibilidad en medio de un contexto realista. Pero no ha resistido la tentación de aportar aspectos imaginativos de su cosecha, justificando el definitivo cambio de título de la película con respecto al libro en que se basa. Precisamente, dichas licencias no han sido del gusto de la crítica cinematográfica internacional. Son apuntes oníricos que permiten una evasión psicológica a la sufrida protagonista, porque Lee Daniels recuerda que se refugiaba en ensoñaciones cuando las cosas le iban mal.
La belleza interior
Lo importante es que Lee Daniels no ha querido hacer una obra perfecta, sino llegar al corazón de la gente, lo que ha conseguido de pleno. Para ello ha sabido transmitir la esencia del personaje de Precious, una chica gorda y analfabeta golpeada por la vida con una crueldad desmedida, y que, a pesar de los malos tratos y abusos sexuales a los que es sometida en su entorno familiar, descubre la fuerza interior para desear salir adelante y sobreponerse a la brutalidad de la ignorancia, gracias al deseo innato de aprender y labrarse un futuro digno.
El mayor acierto de Lee Daniels reside en la elección del reparto, que gira alrededor del hallazgo que supone la debutante Gabourey Sidibe. La chica, que tiene 26 años e interpreta a una adolescente, dato suficiente para hacer callar a los que suelen negar la posibilidad de recibir premios a los que no son intérpretes profesionales, ha conseguido identificarse con Precious a partir del físico como característica en común. Sidibe sabe lo que es sufrir un trato discriminatorio por el simple hecho de ser una negra obesa, pero el sentirse afortunada por no sufrir la marginación social de su personaje le ha llevado a comprender mejor lo que es vivir en un hogar pobre y embrutecido.
La recreación de ambientes tambien ayuda a la identificación del público con el modo de vida tan precario de Precious. La sensación de claustrofobia que crea el verla en un reducido y destartalado apartamento de unos pocos metros cuadrados, maltratada por su madre, gorda de barrio como ella, y sin ninguna colaboración para ocuparse de los hijos nacidos de los abusos del padre, llega a hacerse insoportable. Pero lo que más duele es el obligado silencio, la anulación que sufre una chica a la que nadie ha dado la oportunidad de quererse a sí misma. Porque le han negado la capacidad de expresarse, así que el aprender a leer y escribir será el primer paso para acceder a la confianza personal.
Lee Daniels ha encontrado un diamante en bruto entre la basura de las calles, y ha bastado pulirlo un poco para revelar la belleza íntima que escondía. Porque Precious hace honor a su nombre, ya que su hermosura nace de la valentía con la que afronta el drama cotidiano.
Dirección: Lee Daniels.
Guión: Geoffrey Fletcher, sobre el libro de Sapphire.
Intérpretes: Gabourey Sidibe, Mo'Nique, Mariah Carey, Paula Patton.
País: EE.UU.; 2009.
Duración: 109 minutos.
Género: Drama social.
Lee Daniels ha intentado aligerar en lo posible las caracterizaciones marginales, aunque no ha resistido la tentación de aportar aspectos imaginativos de su propia cosecha; ensoñaciones oníricas que no han sido del gusto de la crítica.
El mayor acierto de Lee Daniels reside en la elección del reparto, que gira alrededor del hallazgo de la debutante Gabourey Sidibe, suficiente para hacer callar a los que suelen negar la posibilidad de recibir premios a los que no son intérpretes profesionales.
«Precious» se ha hecho con algunas de las nominaciones a los Óscar más importantes. Son estas seis: Mejor Película, Mejor Director (Lee Daniels), Mejor Guión Adaptado (Geoffrey Fletcher), Mejor Actriz Principal (Gabourey Sidibe), Mejor Actriz Secundaria (Mo'Nique) y Mejor Montaje (Joe Klotz). No es ni mucho menos una cantidad desproporcionada, teniendo en cuenta que es una película multipremiada, seguramente la que más premios ha acumulado este año. Su carrera triunfal arrancó el año pasado por estas fechas en el Festival de Sundance, donde se llevó el Gran Premio del Jurado, el Premio Especial del Jurado y el Gran Premio del Público. Desde entoncés, raro ha sido el festival internacional en el que no se haya llevado el Premio del Público, lo que también ocurrió en Donostia. En lo que al reparto se refiere, la más galardonada de sus actrices ha sido Mo'Nique, aunque también la protagónica y debutante Gabourey Sidibe ha tenido sus recompensas, sin olvidar a la cantante Mariah Carey, que protagonizó la recogida de premio más divertida cuando subió a recibirlo bastante «achampañada», y es que todo el equipo de la película tiene motivos para celebrarlo.M.I.
Gabourey Sidibe es una chica con estrella, que ha entrado en el mundo del cine en un momento coyunturalmente propicio para la cultura afroamericana. Con su físico jamás se habría presentado a un casting, pero quiso el destino que su madre optara a las pruebas de «Precious» para el papel finalmente interpretado por Mo'Nique. No se atrevió con un personaje tan descarnado, aunque sabía que su hija sí podía hacer el de la joven protagonista, y así fue. Se sentía incapaz de maltratar a su propia hija dentro de una ficción tan realista, por lo que prefirió dejar ese comprometido trabajo a una mujer con más experiencia en el mundo del espectáculo como Mo'Nique, quien tuvo una química especial durante el rodaje con la chica debutante, por más que en pantalla aparezcan enfrentadas.
El fenómeno Gabourey Sidibe no es flor de un día y ya ha actuado en dos nuevas películas. En «The Big C» ha sido dirigida por Bill Condon, compartiendo reparto con Laura Linney y Oliver Platt. En «Yelling to the Sky» lo compartirá con Tim Blake Nelson.M.I.