Cuartos de final
El Cajasol enseña el camino de ganar al Barça
Barcelona 77
Cajasol 72
A. G.
Con las botas puestas, así es como caía ayer el Cajasol de Joan Plaza frente al Barcelona. El 77-72 final refleja lo mucho que debió sufrir la escuadra culé, favorito indiscutible a llevarse esta Copa, para doblegar a un conjunto hispalense que mostró el camino para derrotar a los de Xavi Pascual.
Y si no lo logró fue porque el Barcelona tiene un «fondo de armario» tan amplio que si algunos de sus recursos fallan, siempre puede acudir a por otros, tantos que tiene. ayer fueron jugadores como Lakovic o unos espléndidos minutos finales de Fran Vázquez los que se unieron a los habituales Navarro y Mickeal a la hora de liderar su triunfo. Mientras, Ricky Rubio sufrió lo indecible para imponer su ritmo y su magia.
Los hombres de Joan Plaza saltaron a la cancha con el puñal entre los dientes. Gracias al trabajo sordo de Kirksay -que ayer anotó además 15 puntos- más la anotación de Calloway, Savanovic o el panameño Rubén Douglas, los sevillanos obtuvieron diez puntos de renta ante un Barça impotente, incapaz de correr y de cerrar su rebote ofensivo.
Xavi Pascual empezó a mover su banquillo y comenzó a limar la desventaja, pero sin conseguir empatar el partido sino a última hora. Cajasol no podía aguantar el ritmo defensivo -jugar despacio no implica jugar sin intensidad- y cedía un empate a 37 al descanso.
Puñetazo sobre la mesa
El regreso de los vestuarios supuso la mejor versión del conjunto azulgrana. Rubio anotaba sus cinco puntos para iniciar el despegue de los favoritos, gracias a un triple y un robo que él mismo culminaría. Los andaluces no lograban asumir el cambio de panorama, pero tampoco se dejaban ir, gracias al buen trabajo de Miso y Kirksay.
De hecho, en el cuarto final los de Joan Plaza volverían a estrechar el cerco en el marcador, arrimándose a un punto, 63-62, e incluso contaron con varias posesiones para adelantarse, pero no lograron adelantarse de nuevo. La defensa barcelonista, con la importante vitalidad física de Morris o Fran Vázquez, impedía que los rebotes cayeran tan alegremente en manos andaluzas. Además, Navarro y Mickeal reclamaron su estatus de estrella para abrir un hueco definitivo.
Cajasol quitó la aureola de invencible al Barcelona. A ver si alguien lo confirma.
