Mientras el Ministerio del Interior español informaba del hallazgo de cinco zulos atribuidos a ETA en Hernani y el monte Gorbeia -para lo que desplazó en helicóptero a Ibai Beobide desde prisión hasta las zonas inspeccionadas-, así como de un piso y otro zulo en el Estado francés, el movimiento pro amnistía explicó que la Audiencia Nacional ha aceptado tres medidas establecidas para la prevención de la tortura durante el periodo de incomunicación de Urko Izagirre y Enrique Noya, detenidos el martes por la Policía española en relación a la última operación policial.

En concreto, el tribunal especial ha aceptado que los vascos sean atendidos por un médico de confianza, que sean grabados y que sus allegados sean informados en todo momento de su estado y paradero.

A la par que informaba de la aplicación de las citadas tres medidas preventivas a Izagirre y Noya, el movimiento pro amnistía recordó que han sido muchos también los incomunicados que han denunciado malos tratos habiéndoseles fijado las mismas medidas durante su detención. Así, hizo especial hincapié en que la mejor decisión contra la tortura es la derogación del régimen de incomunicación, y recordó que «todavía no se ha demostrado que se graben las detenciones, porque la defensa no ha tenido opción a ver las supuestas grabaciones».

Camacho sigue hospitalizado

Al respecto, GARA fue informado ayer de que tanto por la mañana como por la tarde los dos vizcainos, aún en manos de la Policía española e incomunicados, fueron atendidos por médicos de confianza.

Quien sí denunció torturas fue el hernaniarra José Camacho, que permanece desde el pasado miércoles, también en régimen de incomunicación, en un centro sanitario de Madrid. Su ingreso hospitalario fue ocultado intencionadamente por fuentes oficiales.

Por lo que respecta a las consecuencias del operativo policial, el Ministerio del Interior informó de que la Guardia Civil trasladó en helicóptero a Ibai Beobide -el primer arrestado en esta operación- tanto al monte Gorbeia como a Hernani para tratar de localizar los zulos referidos en los últimos días y que son atribuidos a la organización armada vasca.

Confirmó el hallazgo de cinco escondites en ambas zonas, que en total almacenarían unos 92 kilos de material para confeccionar explosivos. Además, la Policía francesa y española habrían localizado en la localidad francesa de Bussy un piso que ligaron al donostiarra Faustino Marcos -detenido hace una semana en la estación de Portbou (Girona)- y que las FSE consideran que era «un taller de fabricación de explosivos de ETA».

A su vez, en el pueblo de Arrones, en el Departamento de Allier, se habría encontrado otro zulo en cuyo interior dijeron haber hallado unos 7 kilos de cordón detonante.