La asociación Ahaztuak 1936-1977 demandó ayer «a los diferentes partidos políticos una definición real y efectiva en lo que a la simbología franquista se refiere, asumiendo su total retirada sin ningún tipo de disculpas ni cortapisas y poniendo en marcha todas las facultades que tienen para ello, es decir que acaben con ese perverso «doble juego» que en este terreno algunos de ellos -actualmente ya sólo algunos, afortunadamente- siguen manteniendo para su propia verguenza y como insólita afrenta a la memoria de las mismas víctimas del franquismo a las que en los homenajes oficiales dicen honrar y recordar».

Por otro lado, el portavoz de EA en el Ayuntamiento de Donostia, Ricardo Burutaran, pidió ayer la eliminación del nombre «Conde Plasencia», que hace referencia a José Arrospide Álvarez, «colaborador de Emilio Mola y de los franquistas en la preparación del golpe militar». Demandó que sea retirado «a la mayor brevedad posible».