La Comisión Vecinal contra el Crematorio de la Funeraria Bilbaína en Zumalakarregi nº 10, junto a la casa consistorial de Bilbo, ha convocado para el jueves, a las 19.00, una nueva manifestación, que partirá frente al tanatorio. Los promotores reiteran su oposición al horno incinerador de cadáveres «por ser dañino para la salud de las miles de personas que residen en su entorno».

En un comunicado de prensa, la plataforma ciudadana muestra su rechazo a la forma de proceder de la justicia española, que «una y otra vez, y en ocasiones de forma contradictoria, dan la razón a la empresa Funeraria Bilbaína por pura cuestión de forma». Denuncian que los jueces no han querido entrar en el fondo de la cuestión, que no es otra que los «crematorios son instalaciones industriales clasificadas como molestas, insalubres, nocivas y peligrosas para la salud de las personas que residimos en su entorno, mas cuando es un casco urbano en el que estaríamos afectadas mas de 25.000 personas».

El vecindario se muestra molesto por la nula implicación que en este conflicto ha mantenido el alcalde de Bilbo, Iñaki Azkuna. Recuerdan que «no ha hecho nada», a pesar de que ha tenido en sus manos la posibilidad de poner sobre la mesa otras alternativas de ubicación para el crematorio fuera del casco urbano.

Imposición

Los opositores inciden en que una postura de imposición permanente del crematorio «choca con los deseos de la vecindad que, de forma reiterada, nos está haciendo llegar su voluntad de no utilizar en el futuro los servicios de esa empresa por la falta de sensibilidad y respeto hacia los ciudadanos».

La plataforma recuerda a los responsables de la empresa de pompas fúnebres que les va a encontrar siempre enfrente, con una vigilancia constante de sus actividades y con una denuncia permanente de sus incumplimientos legales.