Los trabajadores de ambulancias de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, que llevaron a cabo ayer el segundo día de huelga de los 15 que han convocado ELA y LAB para las próximas cuatro semanas después de que la patronal se levantara de la mesa, realizaron en Bilbo una donación simbólica de sangre para mostrar los «problemas que genera» el conflicto laboral por el que están atravesando, indicar que no «son indiferentes» a las necesidades de los usuarios y reivindicar nuevamente diversas mejoras en sus condiciones laborales. Los sindicatos se reunirán de nuevo con los empresarios a petición propia, mañana en el Preco, el organismo encargado de la solución voluntaria de conflictos laborales.