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Asier Fernández, de la cama a ganar el título de Bizkaia

El corredor élite del Sanse-Spiuk madrileño estuvo toda la semana enfermo, incluso con fiebre, y sólo se animó a competir en Berriatua «a última hora».

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Unai IRARAGORRI

El jueves estuvo en la cama, con fiebre. El viernes salió a rodar dos horas. Incluso el sábado no tenía pensado correr. A última hora, Asier Fernández cogió el coche y tomo la salida en Berriatua. Unas horas después, estaba en el podio como nuevo campeón de Bizkaia élite.

El vizcaino dio el salto a profesionales con el Orbea en 2007, desde Baqué, aunque tras un año que prefiere no recordar se recalificó. Los últimos años ha corrido en el Telco, Supermercados Froiz y Sanse Spiuk.

En Berriatua logró una merecida recompensa, aunque inesperada tras una semana enfermo. «En un principio no tenía pensado correr porque había estado enfermo durante la semana. Era una carrera dura, buena para mí», apunta. El año pasado fue segundo en el Campeonato de Bizkaia, superado por Filgueira.

«Tuve una mojadura buena el sábado anterior, el jueves estuve en cama y con fiebre. El viernes mejoré y rodé durante dos horas. Y el sábado, a primera hora, viendo el tiempo que hacía, no era optimista, aunque al final me animé», señala. «Mi intención era preparar más que nada la Vuelta a Navarra», añade.

En 2009 corrió encantado en el Super Froiz gallego. Pudo renovar pero prefirió esperar por si llegaba la oportunidad profesional. «La situación es difícil», admite. Tuvo ofertas de buenos equipos, Andalucía y Extremadura-Spiuk, aunque no recaló por falta de presupuesto, y finalmente decidió quedarse en el Sanse Spiuk de San Sebastián de los Reyes. «Con 25 años no se puede correr gratis», destaca. En el pelotón vasco no tiene demasiados huecos por la orientación sub 23 de la mayoría.

Recuerda que su baja en el Orbea fue «un palo bastante duro». «Competí prácticamente todo el año enfermo, sobre todo desde junio, debido a un quiste bronquial que no me extirparon hasta febrero de 2008«. Por ello, luce una cicatriz de cinco centímetros en el cuello. Las analíticas eran muy bajas, tenía infecciones... Se puede decir que corrí anémico», explica.

Además de la bicicleta, se ha labrado una salida laboral. «Acabo de terminar tres años de Osteopatía y tengo previsto abrir una consulta en setiembre-octubre en Portugalete». Sus próximos objetivos son Navarra y Circuito Montañés, y en verano no le faltarán pruebas en el calendario vasco. Corre sin compañeros. «Sólo contra todos, me tengo que aprovechar del trabajo de los demás», bromea.

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