El pleno del pasado jueves en Lizarra se torn� pol�mico tras el abandono de la sala de la alcaldesa, Bego�a Ganuza, y los ediles de su partido, UPN, que fueron acompa�ados por los concejales del PSN. La alcaldesa abandon� la sala cuando los familiares de cinco j�venes que fueron detenidos las pasadas fiestas patronales les pidieron que intercedieran en favor de los procesados para que no sean juzgados en la Audiencia Nacional por un hecho acontecido durante las fiestas del pueblo.

Los familiares, que iniciaron una recogida de firmas en favor del archivo del caso, pretend�an leer un documento y hacer entrega en el Consistorio de los apoyos recogidos, que son ya m�s de 2.850. Este documento con las firmas tambi�n se intent� hacer llegar a los juzgados de Lizarra el pasado d�a 24, aunque en el tribunal no quisieron dar entrada al escrito.

Medio centenar de solidarios se personaron en el pleno del jueves para arropar a la madre de uno de los encausados, quien aprovech� el apartado de ruegos y preguntas para exponer sus demandas a los representantes municipales. Los ciudadanos portaban carteles de �Yo tambi�n estaba ah��, en referencia a la batukada de fiestas contra la que carg� la Guardia Civil, produci�ndose las detenciones.

La alcaldesa lanz� dos avisos para que bajaran los carteles, pero los ciudadanos se mantuvieron firmes. Tras lo cual, Ganuza decidi� marcharse del pleno acompa�ada por sus compa�eros de UPN y los concejales del PSN. Ante este extremo, los concentrados prefirieron recoger las cartulinas a fin de que regresara la alcaldesa. Sin embargo, ninguno de los ediles volvi� a la sala a escuchar el testimonio de vecinos y familiares.

De �agresi�n� a �pertenencia�

Los hechos que se les imputan a los j�venes ocurrieron durante las fiestas del pasado a�o, en agosto. La Guardia Civil carg� contra una kalejira popular, porque en ella hab�a una pancarta con un lema que coincid�a con el de una manifestaci�n desconvocada por Segi.

Durante los altercados fueron detenidos cinco j�venes a los que se acus� de un delito de agresi�n. A tres de ellos se les imput� el portar esa pancarta y ser los convocantes. M�s tarde, la juez decidi� cambiar la acusaci�n a otra de �pertenencia a organizaci�n terrorista�, por lo que podr�an acabar siendo juzgados por la Audiencia Nacional espa�ola. Los familiares recaban firmas para que se archive este procedimiento judicial.