La titular del Juzgado de Instrucción nº 2 de Azpeitia ha remitido a la Audiencia Nacional española el caso de Ousmane, un senegalés vecino de Bilbo que tras un día de mercadillo en Azpeitia fue detenido acusado de un delito de «falsificación de moneda y timbre». Ousmane tenía 400 euros procedentes de las ventas y un cheque de 200 euros que Cáritas le había entregado para pagar el alquiler. Entre el dinero tenía tres billetes falsos de 20 euros.

SOS Racismo denuncia que, «salvo el color» de la piel, no hay ningún otro indicio que haga sospechar que sea un falsificador, en vez de pensar que alguien le había «colado» tres billetes falsos.

También censuran que la Ertzaintza y la Policía Municipal carecen de protocolos para evitar el «racismo inconsciente».