Triunfo de Rui Costa, de Caisse d'Epargne, en la penúltima etapa del Tour de Suiza
Una transición con ortigas
El Caisse d'Epargne tiró de trabajo de equipo para el triunfo del portugués. Mientras, Robert Gesink debió quemar a todos sus compañeros para evitar fugas peligrosas. La crono de hoy decide la ronda.
Arnaitz GORRITI
La contrarreloj de hoy en Liestal decidirá el Tour de Suiza, donde Robert Gesink deberá mantener su exigua ventaja sobre rivales tan peligrosos como Urán, Morabito o el mismísimo Armstrong. Pero antes había que salvar una última etapa de transición, 172 kilómetros entre Wetzikon y Liestal, una travesía con cuatro puertos de tercera e infinidad de repechos: ortigas, zarzas y espinas para aquel que deseara controlar el pelotón.
De cualquier modo, Gesink pudo solventar la papeleta, aunque para ello debió quemar a sus compañeros de Rabobank. El trabajo de equipo también fue vital para la victoria parcial, ya que los Caisse supieron jugar en conjunto para, de la mano de José Joaquín Rojas, controlar una numerosa fuga -Rojas y Rui Costa de Caisse, Monfort de Columbia, Casar de Francaise des Jeux, Danielson de Garmin, Vanotti de Liquigas, Rast de RadioShack, Nordhaug de Sky y Ciolek de Milram- sobre todo a un Monfort desatado, y hacer que el portugués Rui Costa saliera victorioso.
Ahí, Maxime Monfort y Rojas demostraron ser los que mejor iban cuesta arriba, pero sin lograr descolgar del todo a sus compañeros, de modo que en los descensos el grupo se unía -salvo Rast y Ciolek- y que no hubiera nadie capaz de controlar aquello. Hasta que el portugués de Caisse se escapó en la penúltima cuesta. Monfort arrastró a Rojas, pero éste frenó al belga en la persecución del luso. Gran trabajo de equipo.
Mientras, en el pelotón hombres de Saxo Bank probaban a Gesink. El pelotón se hizo trizas y más de uno se llevó un buen calentón, pero sin que la sangre llegara al río.
La peor noticia llegaba del Katusha, ya que se hacía saber que el luxemburgués Kim Kirchen no tomaba la salida porque tuvo que ser hospitalizado debido a problemas cardíacos. Las pruebas descartaron que haya sufrido un infarto o una trombosis. El corredor permanece estable, aunque deberá seguir en coma inducido al menos otras 24 horas.
Victoria de Nibali
En otro orden de cosas, el italiano del Liquigas, Vincenzo Nibali, se adjudicaba la tercera etapa del Tour de Eslovenia, que terminaba en alto y era la etapa reina de la carrera. Nibali ha atacado a 13 kilómetros de meta y llegaba a la misma en solitario con poco más de medio minuto de ventaja sobre el segundo. Además del triunfo de etapa, el corredor de Liquigas ascendía también al liderato de la prueba.
Otro doblete, este este caso en el Star Elektrotoeur, lo conseguía el australiano de Columbia Adam Hansen, tras imponerse en la cuarta etapa.
Por último, Blel Kadri, de Ag2r y David Moncoutie, de Cofidis, se llevaron los dos sectores de la segunda etapa de la Route du Sud. El francés de Cofidis, que se llevó la contrarreloj, es el nuevo líder.
Seguros Bilbao dominaba de cabo a rabo la prueba del Lehendakari Txapelketa disputada en la localidad vizcaina de Turtzioz en la que se impuso su corredor Adrián López, con su compañero Ibai Salas en tercer lugar. La segunda plaza fue para el corredor del Naturgas Energía, Jon Larrinaga, uno de los más activos de la bonita jornada ciclista de la mañana de ayer.
Mientras, en el barrio Osintxu de Bergara se disputaba el Gran Premio Soraluce S. Coop, valedera para el Torneo Euskaldun de féminas, con triunfo de la corredora del Debabarrena Leire Olaberria. Débora Gálvez y Ane Santesteban completarían los puestos de honor.
A. G.