Los presos de Valdemoro cumplen ya una semana de ayuno y pierden 7 kilos
Pese a que Patxi Uranga se ha visto obligado a dejar la huelga de hambre por motivos de salud, Iker Araguas y Asier Kintana mantiene la protesta en la cárcel de Valdemoro y han perdido siete kilos.GARA | DONOSTIA
El iruindarra Iker Araguas y el vecino de Errekalde Asier Kintana, recluidos en la cárcel de Valdemoro, han perdido siete kilos de peso debido a la huelga de hambre que emprendieron el pasado lunes para protestar por el régimen de aislamiento al que los tienen sometidos.
El preso político Patxi Uranga, por su parte, se ha visto forzado a dejar la protesta por problemas de salud. En la nota del movimiento pro amnistía precisan, sin embargo, que Uranga mantendrá un encierro mientras sus compañeros sigan adelante con la huelga de hambre.
Los tres presos políticos están ubicados en distintos módulos de la cárcel y exigen que sean colocados en el mismo, además de que termine el aislamiento que les imponen dentro de la prisión.
Ayer, medio centenar de vecinos del barrio de Errekalde de Bilbo mosratron su solidaridad a estos presos en huelga de hambre.
Por otra parte, el movimiento antirepresivo denunció ayer los traslados a los que ha sido sometido el preso vasco Josu Amantes, que en diez meses ha sido destinado a tres cárceles diferentes.
La originalidad no está reñida con la solidaridad. Así lo demostraron 80 ciclistas de Hego Uribe que se recorrieron la comarca en favor de los derechos de los presos y exigiendo la puesta en libertad de los presos que han cumplido su condena y de los que se encuentran enfermos.
Además, como cada lunes se sucedieron las concentraciones; 41 personas se concentraron en Iurreta; 55 en Ataun; 13 en Euba; 65 en Santurtzi; 78 en Ondarroa; 18 en Ordizia, al igual que en Zaldibar; y 17 en Zaldibia y Otxarkoaga. En Altza se sumaron 29 y en el de Añorga 13, en el que denunciaron que la Ertzaintza mediante su megafonía les espetó un «viva españa». En Altsasu por su parte, el domingo se concentraba 50 vecinos.