El presidente de Eslovaquia, Ivan Gasparovic, pidió ayer a la conservadora Iveta Radicova la formación del nuevo Gobierno después de que el primer ministro saliente, Robert Fico, anunciara que no era capaz de constituirlo.

El nuevo Ejecutivo estará integrado por cuatro partidos de centroderecha que la víspera cerraron un acuerdo en virtud del cual se comprometieron a reducir el déficit y mejorar las relaciones con Hungría, que se enfriaron durante el Gobierno de centroizquierda de Fico, en el que participaban nacionalistas antihúngaros.

Gasparovic dijo que daba a Radicova, líder de la Unión Democrática y Cristiana Eslovaca (SDKU-DS), hasta la primera sesión del Parlamento, el 8 de julio, para que presente un Gabinete con respaldo parlamentario suficiente.