Nuestra tierra, nuestro pueblo, está siendo objeto de las mayores agresiones medioambientales y sociales de las últimas décadas». Así arranca el manifiesto de las trece plataformas que confluirán en la manifestación de este sábado en Iruñea. De realizarse los proyectos que tiene en mente el Gobierno de Miguel Sanz, la repercusión negativa para con el medio ambiente y los ciudadanos navarros será irreversible. Frente a ello, la respuesta que lanzan es unánime: «respeto a la voluntad popular».

Nafarroa Bizirik Nahi Dugu! surge precisamente de esa «supeditación de los derechos sociales y ciudadanos». El modelo de desarrollo diseñado desde las altas esferas del poder en Nafarroa parte de la imposición a entidades locales de proyectos «irracionales» que sin embargo interesan a los poderes económicos y fácticos del herrialde. Por ello, las trece plataformas han decidido experimentar con esta unión centrada en la defensa de Nafarroa «frente a este modelo de sociedad insostenible, antisocial y antidemocrático». La manifestación del sábado está llamada a ser un primer punto de encuentro de todas estas iniciativas.

Arga Bizirik!

Después de haber conseguido una depuradora que limpiara las aguas del río Arga, contaminadas de vertidos a su paso por Iruñea, Arga Bizirik lucha contra la «privatización y especulación» que rodea a este afluente del Ebro. En concreto, el proyecto más destacado es la represa del río Arga que se plantea cerca de Gares, de más de 12 metros de altura.

Larra-Belagua Elkartea

Las pistas de esquí nórdico en Larra-Belagua han resultado un «fiasco económico», denuncia Pedro Bueno, de Larra Belagua Elkartea. «La modificación de la ley de espacios naturales les permitió intervenir y meter hormigón sin sentido en la zona y sin repercusión económica », explican desde la plataforma. La gestión de los terrenos ha sido enajenada a los pueblos y la lleva la empresa semipública Sprin, lo que hace temer a Bueno una solución desesperada: que acaben construyendo en zonas hoy vírgenes.

Línea de alta tensión Gasteiz-Castejón

La plataforma contra la línea de alta tensión que une Gasteiz con Castejón es joven y ha empezado con fuerza. «Hemos conseguido parar en parte y modificar el trazado de la autopista eléctrica, gracias al rechazo total de los ayuntamientos por los que pasa. No obstante, la zona de Lizarraldea sigue amenazada y tenemos que seguir dando mucha caña», explica Koldo Bargota.

Amaiurko Herria

Las canteras de Munoa amenazan el entorno de Amaiur. El pueblo realizó un referéndum popular, en el que participó el 87% de los habitantes y arrojó un resultado demoledor: el 94,5% expresó su rechazo a la cantera y a los sondeos que se están realizando actualmente en los estudios de viabilidad.

Aroztegia... eta gero zer?

Garbiñe Elizegi, miembro de Aroztegia... eta gero zer?, critica el proyecto de un campo de golf, una urbanización y un hotel de cuatro estrellas en Lekarotz. «Supone recalificar 40 hectáreas y construir 252 casas en un pueblo de sólo 3oo habitantes», dice Elizegi. En Lekarotz, los vecinos votaron «no» al proyecto, pero el Ayuntamiento de Baztan sigue adelante con él. «Buscamos paralizar este proyecto innecesario, sino también abrir un debate sobre el modelo socioeconómico y el futuro de Baztan», explica la activista.

AHT Gelditu! Elkarlana

La coordinadora contra el Tren de Alta Velocidad lo rechaza por ser «económicamente deficitario, socialmente injusto y ambientalmente insostenible». En concreto, y aun sin saberse cuándo el Estado español hará el empalme con el tramo navarro, el Gobierno de UPN se gastará 387,85 millones de euros en la infraestructura más costosa de la historia de Euskal Herria.

Sakana Bizirik

La pretensión de la cementera de Olazti de quemar residuos, constituye una de las amenazas estratégicas más importantes en Nafarroa. Como expone Eduardo Agirre, de Sakana Bizirik: «Se trata de una incineradora encubierta, la primera del herrialde». El caso cobra gravedad en cuanto que la cementera quiere desarrollar esa nueva actividad en sus instalaciones, sin respetar las distancias que marca la ley (se encuentra a menos de 300 metros de un núcleo urbano). Ya han recogido más de 3.200 firmas en contra del proyecto. Agirre remarca que «las instalaciones no son adecuadas, carece de filtros para dioxinas, el sistema de combustión no es el adecuado, lo que la convierte en una instalación infinitamente más peligrosa que una incineradora ad hoc».

Asamblea de Afectados por Itoitz

Eduardo Ardanaz, de Itoitzko Kaltetutako Auzokideen Asanblada, comenta que se suman a la iniciativa «por desgracia, porque sabemos qué es luchar contra una gran infraestructura y perder». Para Ardanaz, movilizaciones así son necesarias para que «la sociedad navarra reflexione, para que impida obras que se hacen por hacer, obras para unos pocos nada más». Desde la Asamblea recuerdan que «aunque el tiempo te dé la razón, nadie responde. Ahí tenemos el Canal, que nunca será rentable». Ahora, la lucha de los afectados apunta hacia la seguridad, sobre todo por los terremotos.

Urdiaingo Makroproiektuaren Aurka

El Gobierno navarro pretende construir un macropolígono entre los pueblos de Urdiain y Altsasu. Los vecinos de Urdiain denuncian que la infraestructura, de unas 65 hectáreas, destrozará las tierras más fértiles del pueblo. Mientras, otros alcaldes de Sakana denuncian que este macroproyecto amenaza la viabilidad de los pequeños polígonos que han desarrollado y, por tanto, la financiación del resto de municipios.

Coordinadora Monte Alduide

La cantera de Zilbeti se ha convertido en una pesadilla para los vecinos. «Se trata de una zona protegida por la Red Natura 2000, resultó una de las primeras elegidas en toda Europa y, de seguir adelante el proyecto, será la primera en ser descatalogada», explica Juan Luis Martínez, de la Coordinadora Monte Alduide, que denuncia que «hay muchas formas de extracción, pero Magnesitas busca la más barata y tiene mucha prisa por comenzar a extraer».

Plataforma Leia

«La plataforma Leia está un poco dormida, al igual que el Gobierno navarro mantiene dormido el proyecto de la autovía transpirenaica tras la renuncia del Estado francés», explican desde Leia. Por el momento, el Ejecutivo navarro apuesta por reacondicionar la N-135. «Tenemos las antenas puestas para que no amplíe las dimensiones del proyecto y realmente dé una respuesta racional al problema del transporte de mercancías en la zona», advierte Martín Saragueta.

Plataforma de la Ribera + Centrales No

Las térmicas de Castejón son las empresas más contaminantes de todo Nafarroa. La lucha contra la implantación de estas centrales «innecesarias» se remonta siete años atrás y combina la movilización social con la vía judicial. Ya se ha conseguido declarar ilegal una de las tres, que pese a todo sigue echando humo mientras el Supremo español delibera el recurso presentado por el Gobierno de Nafarroa. Mientras, Iberdrola pretende construir una cuarta. Jesús Mari Tomás, de + Centrales No, considera que las térmicas constituyen una «aberración medioambiental» por las emisiones de gases a la atmósfera, el consumo de agua que requieren y su dependencia de combustibles fósiles importados de terceros países.

Por el tren social. No al TAV

Varias plataformas de la Ribera sumaron fuerzas hace tres años para reivindicar el ferrocarril como servicio público. «El transporte por raíles que se plantea no sirve para la mayoría social, en gran medida por cuestiones económicas. Sin embargo, el uso mayoritario del ferrocarril es para medias y cortas distancias, por lo que defendemos una estructura viaria que consolide esta preferencia y vertebre el territorio», explica Pablo Lorente. La visión opuesta a este escenario es la apuesta por la Alta Velocidad. «El TAV es símbolo de un modelo de tren esquilmador de los recursos medioambientales y económicos en beneficio de una minoría», afirma Lorente.