El californiano valle de Yosemite da para todo. La última noticia relevante que nos ha llegado ha sido la firmada por Alex Honnold. Estadounidense de 24 años, este joven escalador es una de las figuras más representativas de la escalada en solitario; muchas de ellas integrales. Hace un par de años, por ejemplo, fue capaz de escalar en solo la vía «Astroman» (IV, 6c+, 10 largos) y «The Rostrum» (IV, 6c+, 8 largos). O el free-solo de hace un año en «Moonlight Buttress» (V, 7b+, 9 largos) en Zion.

El pasado 22 de junio, este prolífico escalador firmó un récord de velocidad en Yosemite al encadenar en solo dos líneas de grado VI. Primero escaló la «Regular» (VI, 7a+, 23 largos) del Half Dome y después «The Nose» (VI, 6, C1, 31 largos).

El solo, sobre todo integral, se ha descrito como la forma más pura y peligrosa de la escalada. Honnold cogió esta definición hace años y todavía no la ha soltado: «Ya de niño empecé a subirme a todos los sitios sin atarme la cuerda. Era una época que leía las historias de Bachar y Croft. Ahora, en cambio, las razones son diferentes. Era emocionante. No sé como me hecho fuerte mentalmente; no sé si aún lo soy».

Menos de 8 horas

El 22 de junio se levanta a las 4.45, pero, como estaba todavía muy oscuro, decidió esperar. «Creo que empecé a escalar de verdad hacia las 5.30, y en dos horas y nueve minutos subí el Half Dome. Me llevé una cuerda bastante corta, que no la utilicé, y una pequeña mochila con agua y algunos alimentos», informa Honnold.

Tras el Half Dome se fue al Capitán. Le esperaba «The Nose» y en 5 horas y 49 minutos escalaba sus 31 largos. «No me preocupé mucho de escalar todo en libre. Me gusta mucho, pero algunas secciones tiré de artificial y también utilicé la cuerda para hacer los pertinentes péndulos que exige esta ruta. Tenía esperanza de romper el récord de velocidad del Half Dome que está en 1 hora y 50 minutos. Pero me detuve a observar dos íncreíbles aves y no quise darme prisa», afirma el escalador estadounidense.

De esta forma, este joven escalador capaz de hacerse en solitario la «Salathé» (VI, 8a+) en 8 horas y media, ha logrado un nuevo récord de velocidad y un encadenamiento en solitario.

Una actividad muy desarrollada en la historia de ese valle californiano, pero que no gusta nada en otras partes del mundo.

Honnold lo tiene claro, es lo que le va y por eso practica el solitario integral: «Me inspiro mucho en los solitarios de Peter Croft. El solitario representa un compromiso total. Es la perfección. La ejecución. Me resulta gratificante y desafiante. Lo disfruto. Algunos dicen que los que practicamos los solitarios en libre deseamos la muerte. Pero no estoy de acuerdo con esa apreciación, y sí con la que hizo Dan Osman: `No quieres morir, ¿no? Así pues, simplemente no te caigas'».