TOUR 2010 Toda la caravana quedó impresionada por la cantidad de espectadores de la primera etapa y por la utilización masiva de bicicletas
Garate destaca la especial forma de vivir el ciclismo en Centroeuropa
Tras dos años en Rabobank y tres en el Quick Step, el irundarra se ha quedado impresionado en los días pasados en Rotterdam por la cultura de la bicicleta que hay en toda Holanda y la diferencia de flamencos y valones. Espera un buen Tour para Menchov y Gesink.
Joseba ITURRIA | BRUSELAS
La caravana del Tour dejó ayer Holanda para entrar en Flandes y acabar en Bruselas, y todos sus integrantes se han quedado impresionados tras ver cómo se vive el ciclismo en el centro de Europa. No sólo por las decenas de millares de personas que llenaron las rutas en la prólogo o en la primera etapa. También por la cantidad de bicicletas de todo tipo que se ven en unos países que sirven de ejemplo de cómo se pueden utilizar como vehículo para desplazarse para personas de todas las edades y clases.
Uno ha visto todo tipo de artilugios a pedales en estos días. Un padre con tres niños en una misma bici, bicicletas con todo tipo de complementos y alforjas y una especie de tranvía movido por una decena de jóvenes que pedaleaban mientras bebían cerveza en la barra que tenían colocada en su vehículo.
Hasta un corredor que conoce como pocos esta cultura ciclista por llevar años en Rabobank y Quick Step con cantidad de holandeses, flamencos y valones como compañeros se ha quedado impresionado en los días vividos en Rotterdam. Juanma Garate destaca a GARA que «ya tuvimos el ejemplo de la Vuelta el año pasado y ya entonces el público respondió muy bien, mejor de lo que yo esperaba, pero en el Tour la gente ha respondido mejor. Rabobank es como una institución que representa un país y la gente se vuelca con el equipo. La prólogo fue muy emocionante y los principales contrarrelojistas del equipo sintieron esa presión especial de salir de Holanda. Me parece lógico que el Tour salga de Holanda, me sorprendió más que lo hiciera la Vuelta. Este país ha acogido las últimas salidas de las tres grandes y eso demuestra la gran afición que hay».
Una mujer con cuatro niños
Así, Garate recuerda que los holandeses maman desde su niñez una cultura ciclista y le ha llamado la atención cómo «he visto a una mujer que llevaba a dos niños en su bicicleta, un bebé delante y otro niño atrás, y llevaba otros dos con sus bicicletas. La mujer iba con cuatro niños, agarraba el manillar con una mano y con otra la bici de un hijo. Le digo a mi mujer que vaya con la niña a la tienda y me manda a la mierda. Aquí la cultura de la bicicleta es increíble».
Así cuenta otra anécdota reveladora: «No hay un país con tanta tradición en el que todo el mundo se desplace en bici hasta a hacer la compra. Tienen todo el país preparado. Cada carretera tiene su bidegorri y estás obligado a ir en bici por él. El viernes, por ejemplo, hicimos los primeros 60 kilómetros de la primera etapa y nos metimos en una carretera normal, que no era una autovía ni nada parecido, y enseguida nos vino la policía a decirnos si estábamos locos. Parecía que habíamos cometido un delito. Daba igual que fuéramos del Rabobank y que reconociéramos la primera etapa del Tour. Nos dijo que debíamos ir por el bidegorri».
Esa cultura también la palpa en sus compañeros de equipo: «La pasión que tienen por la bicicleta es difícil de comparar con la de ningún país. Piensan las 24 horas en la bicicleta. No hay nada más. En la concentración que hicimos en Sierra Nevada, hablaba con Gesink y le animaba a ir a entrenarnos con otro equipo para hacer amigos y me respondió que no le hacen falta amigos en la bicicleta. No tienen otra vida al margen de ella y eso llama la atención».
Porque Garate ha estado años en el Quick Step y entiende que la pasión con la que se vive el ciclismo nada tiene que ver con la de valones y flamencos: «En Bélgica son diferentes. Quizás como el equipo es una mezcla que hubo entre Mapei y Quick Step, entraron muchos italianos y el equipo está latinizado, son más abiertos. Son diferentes a nosotros o a los italianos, pero más latinos que los holandeses».
«Mejor que el año pasado»
Juanma Garate destaca que ha llegado al Tour «bastante mejor que el año pasado. Personalmente estoy con más tranquilidad tras haber ganado una etapa entonces. Tener una en las tres grandes me ha quitado la ansiedad que tenía. Corro con las mismas ganas de ganar, pero no pienso en qué supone ganar porque lo viví el año pasado. Entonces venía a hacer mi trabajo para el equipo, pero no hubo oportunidad de hacerlo porque la carrera no fue bien para nuestros líderes y tuvimos más opciones de buscar una etapa. Espero que ahora no haya tantas oportunidades y podamos trabajar para Gesink y Menchov».
Explica que «he estado 40 días sin correr antes de ir a Suiza y me vi muy bien allí, mejor de lo que esperaba. Nos ayudó estar 18 días concentrados en Sierra Nevada. Hace tres años lo probé por vez primera vez y me sentó muy bien. Creo que el hecho de hacer una concentración, sea en altura o no, por sí solo es superpositivo porque estás entrenándote, descansando y mentalizándote para la carrera. Si estás en casa debes atender a la familia y a otras cosas. Si la concentración la haces en altura es más positivo aún. De hecho, hemos estado en Sierra Nevada con las selecciones italiana y alemana de ciclismo y con la brasileña de natación y si vamos todos allí es porque lo notamos».
Garate estuvo concentrado junto a Gesink, Niermann, Ten Dam y Boom, y tras la Dauphiné acudió allí Denis Menchov. Tras entrenarse con sus dos líderes, trasmite que «los veo bien. Denis cuenta con una experiencia que no tiene Robert, al que la falta de experiencia y el nerviosismo le llevan a cometer errores y caerse. En ese sentido son corredores diferentes, Denis corre más atrás, más relajado. A Robert le gusta ir más adelante, en tensión. No quiere verse sorprendido. Es más impulsivo y Denis más tranquilo. Denis va mejor contrarreloj y Robert sube un poco mejor, pero no me gustaría enfocar esto como si tuviéramos el rival en casa. Al final luchamos contra los demás. No luchamos entre nosotros».
«Tour para gente inteligente»
Espera un «Tour para gente inteligente, con experiencia. Van a querer reventar el Tour algún día. Tanto el equipo de Armstrong como el de los Schleck buscarán situaciones para meter en dificultad a Astana y debemos aprovecharnos de ello. Debemos ser los más listos y meternos en esas fugas que no espero que se produzcan pronto porque a esos equipos no les va interesar cargar mucho al equipo, porque se les haría el Tour mucho más largo. Si se intenta ahora, te echas la responsabilidad de la carrera encima. Bruyneel es inteligente y sabe que se le puede hacer largo. No lo va a intentar desde el principio, creo que esperará a los Alpes para intentar revolver. No se puede esperar a los Pirineos para hacer estas cosas y hay que buscarlo más de un día. No se puede esperar hasta el último momento para sorprender a tus rivales».
Tiene claro que si hay un escenario para repetir la gesta del Ventoux del año pasado elegiría la etapa que acaba en el Tourmalet «con la afición vasca que va a estar allí. Pero no pienso tanto en esa etapa ni en ninguna otra. Tengo claro a lo que he venido, que es para trabajar, aunque si para el equipo la situación se vuelve desfavorable habría que intentarlo».
Sobre los favoritos comenta que «Contador es el número 1 y después tenemos un grupo con los Schleck y Armstrong y otro con Leipheimer, Evans y Basso entre los que yo incluiría a Denis y a Robert. Y luego hay otro siguiente grupo que para mí son los peligrosos de verdad, corredores como Kreuziger o Fuglsang, gente de ese calibre con la que nadie cuenta mucho y que pueden llegar de atrás adelante si llegan fugas con tiempo».
«No hay un país con tanta tradición en el que todos se desplazan en bici hasta para hacer la compra. Y la pasión que tienen por la bicicleta los ciclistas holandeses es difícil de comparar con la de ningún país. Piensan las 24 horas en la bici».
«Son diferentes. Quizás como es una mezcla con Mapei, entraron muchos italianos y el equipo está latinizado, son más abiertos. Son diferentes a nosotros o a los italianos, pero son más latinos que los holandeses».
Lugar y fecha de nacimiento: Oryol (RUS), 25-1-1978.
Equipos: Banesto amateur (1998-99), Banesto profesional (2000-04), Rabobank (2005-10).
PALMARÉS:
Dos etapas y general del Giro (2009). Cuatro etapas y dos generales de la Vuelta (2005 y 07). Tour del Porvenir (2001). Etapa Dauphiné (2002). Clásica de los Puertos (2003). Etapa y general Euskal Herriko Itzulia. Etapas en París Niza y Aragón (2004), Tour y Dauphiné (2006) y Volta (2007).
TRAYECTORIA:
Su brillante progresión, con victoria en la Vuelta a Lleida con sólo 19 años, llevó a Banesto a ficharlo para su equipo aficionado y pasarlo al profesional, aunque sus mayores logros han llegado en Rabobank con tres grandes. En el Tour ha sido 11º y mejor joven (2003), 5º (2006) y 3º (2008).