Cambios en la mancomunidad de Sanmarko
La izquierda abertzale acusa a PNV y H1! de aplicar la Ley de Partidos
Detractores y defensores del sistema de recogida puerta a puerta comparecieron ayer ante la prensa. Mientras la izquierda abertzale denunció que PNV y H1! se aprovechan de la Ley de Partidos para justificar el cambio de gobierno de Sanmarko, presidentes de las mancomunidades de Urola Kosta y Debabarrena alertaron de que el puerta a puerta «es ruinoso». Por su parte, Gipuzkoa Zero Zabor aplaudió a Debagoiena por su decisión de implantar el sistema.
Janire ARRONDO | DONOSTIA
Alcaldes y concejales de la izquierda abertzale con representación en cinco mancomunidades guipuzcoanas criticaron ayer la decisión de PSE, PNV y Hamaikabat (H1!) de «derrocar» el actual gobierno de la Mancomunidad de Sanmarko. Advirtieron de que, a pesar de maniobras como las que tienen en marcha en Lasarte-Oria y Urnieta, el puerta a puerta «seguirá expandiéndose por Gipuzkoa».
Iñaki Errazkin, ex alcalde de Azpeitia y miembro de la Mancomunidad de Urola Erdia, y Pedro Lasagabaster, alcalde de Eskoriatza y vicepresidente de la de Debagoiena, acompañados del alcalde de Mallabia, Aitor Loiola, de la teniente de alcalde de Arrasate, Oihana Aranburu, del vicepresidente de Sanmarko, Imanol Azpiroz, y de la alcaldesa de Ikaztegieta, Eneritz Maiz, se mostraron sorprendidos ante los argumentos que utilizan para justificar su actitud. En su iniciativa de sustituir a miembros de Sanmarko y acabar, de esta forma, con el puerta a puerta, PSE, PNV y H1! afirman que la actual mayoría de la Mancomunidad «no supone un reflejo de las mayorías conseguidas en las últimas elecciones municipales». Los ediles respondieron que «a la izquierda abertzale ni siquiera se le permitió presentarse a las elecciones» en muchos municipios de Gipuzkoa y recordaron que «fue la segunda fuerza más votada para la Diputación». Así, aunque representantes de PNV o H1! digan que condenan la Ley de Partidos, según Errazkin y Lasagabaster, «son ellos los que indirectamente la sustentan mediante sus actuaciones».
Por otra parte, denunciaron que los citados partidos «tratan de dibujar un escenario» en la que Sanmarko sería la única «oveja negra» que se opone al modelo de gestión de residuos aprobado por la Diputación de Gipuzkoa. «Otra vez intentan confundir», se quejaron. A su juicio, «el problema lo tiene la Diputación», que «intenta boicotear» el sistema puerta a puerta, porque al ofrecer más de un 80% de recogida selectiva y apostar decididamente por el reciclaje «hace peligrar la justificación de la incineradora».
PSE, PNV y H1! «quieren imponer a los guipuzcoanos» la incineradora que se construirá en Zubieta, indicaron los portavoces, quienes proclamaron que paralizarán este proyecto, porque van a «matar de hambre» la infraestructura.
«H1!, manipulando datos»
Ayer por la mañana también comparecieron ante la prensa los presidentes de las mancomunidades de Urola Kosta y de Debabarrena, lideradas por el PNV. Denunciaron que el puerta a puerta es «económicamente ruinoso», aunque las tres localidades que ya conocen el sistema, Usurbil, Oiartzun y Hernani, hayan mostrado lo contrario. Los dirigentes de estas mancomunidades, Lide Amilibia y Manuel Astray, se mostraron seguros de que implantar este siste- ma «multiplicaría por tres» los actuales costes.
En la misma rueda de prensa intervino el concejal de Usurbil Luis Mari Ormaetxea (H1!), quien aseguró que esta localidad «está siendo arruinada».
Imanol Azpiroz, también concejal de Usurbil, respondió que «no se puede tener en cuenta lo que dice H1!, porque sabemos que, sobre todo los de Usurbil, hacen un uso político del puerta a puerta». «Manipulan datos afirmando que el puerta a puerta resulta excesivamente caro, los utilizan como les interesa», explicó Azpiroz.
Gipuzkoa hacia «basura cero»
Por otro lado, desde la plataforma Gipuzkoa Zero Zabor aplaudieron la decisión de la Mancomunidad de Debagoiena de implantar el puerta a puerta en toda su comarca. «Actualmente 36.000 habitantes demostramos que es posible gestionar los residuos sin incineradora, y pronto seremos más», decían delante de las obras ya iniciadas de la carretera que dará acceso a la incineradora de Zubieta.
GZZ rechazó «los ataques» que se están produciendo en algunas localidades contra el puerta a puerta y se remitió a los datos para manifestar que este sistema «es el más eficaz». En Usurbil, con 6.000 habitantes, se recogen 90 toneladas de orgánico al mes. En Gipuzkoa tienen opción al quinto contenedor 88.000 personas, y al mes se separan 70 toneladas.
Asimismo, como dice su nombre, GZZ explicó que seguirán trabajando para conseguir la «total reducción de basuras».
Ediles del PSE y PNV de Urnieta registraron el pasado 13 de julio una moción para sustituir al representante de Urnieta en Sanmarko, Iñaki Mendizabal, por la concejala Miren Martiarena del PNV. Así, los defensores de la incineradora tendrían la mayoría en el gobierno de la mancomunidad. El alcalde de la localidad, Mikel Izagirre, aclaró a GARA que podían presentar esta moción hace años «pero vienen ahora, en vísperas de las elecciones». «Necesitan la incineradora porque tienen intereses económicos», decía. Para Izagirre la clave está en que con el puerta a puerta «se ha demostrado que es posible una gestión sin incineradora».
Iñaki Mendizabal, el concejal de la izquierda abertzale, tiene claro que ésta «es una maniobra política contra un proyecto concreto». Para Mendizabal, «hay un problema con los residuos al que hay que darle una solución y se ha convertido en un elemento frontal». Aseguraba que se le está dando «un uso político» a un tema que no lo es. En cuanto al quinto contenedor, para él es «únicamente» una alternativa: «En Irun, Tolosa o Eibar pueden instalarlo, y no lo hacen». J. A.
