El nuevo presidente de la Caja Vital, Carlos Zapatero, invitó ayer a BBK y a Kutxa a crear, «desde el respeto y la colaboración, dibujemos un futuro en el que se vislumbre un potente sector financiero vasco». Tras ser elegido por el Consejo de Administración con el apoyo del PSE y del PNV, Zapatero destacó la necesidad de crecimiento de la caja alavesa, «desde el sostenimiento y fortalecimiento de nuestra identidad alavesa», y para ello, apeló a la colaboración con las «cajas hermanas». El nuevo presidente, hasta ahora viceconsejero de Trabajo del Gobierno de Lakua, reconoció que llega al cargo «en un momento delicado», aunque se comprometió a trabajar para que «circule el crédito y para que la ciudadanía renueve y refuerce su confianza» en la entidad. Zapatero anunció que dedicará sus primeros esfuerzos a la gestión financiera, económica y social de la Caja, y tratará de huir de polémicas.

En la votación, el candidato del PSE recibió el apoyo de este partido y del PNV, mientras que el PP y Aralar se abstuvieron, y EA votó en blanco. De los 83 asistentes a la asamblea, 44 votaron a favor de Zapatero, 18 en blanco, 1 voto fue nulo y se abstuvieron 20 compromisarios. El PP había pedido suspender la asamblea e incluso presentó una demanda judicial para impedir el nombramiento de Zapatero, al entender que contraviene la sentencia que declaró nula la candidatura encabezada por Rojo. Rreclamaba la entrada en el Consejo de tres miembros del PP, de ahí que anunciaran que podrían impugnar la votación. Caja Vital entiende sin embargo, que con la Asamblea de ayer se cumple la sentencia que declaró nulo el nombramiento de Rojo en 2008, al haber dimitido éste y los otros dos vocales de su candidatura.