Nada más terminar el campeonato de Euskadi, vista la supremacía de Kaiku, Urdaibai era consciente de que muchas de sus opciones de salvar la temporada pasaban por completar un excelente campeonato de liga, y la conjura de la cuadrilla bermeana empezó con todo un recital: exhibición en aguas de Algorta y a tan sólo dos puntos de Orio.

Los hombres que dirige José Manuel Francisco recobraron la maltrecha moral a base de paladas llenas de casta y orgullo, y lo que hace dos semanas parecía algo inverosímil ha acabado por convertirse casi en el último clavo ardiendo al que aferrarse. Los vizcainos no parecen arrugarse ante tal empresa y dejaron claro que a partir de ahora habrá que contar con ellos.

Urdaibai salió desde la primera palada dispuesto a romper la regata y en busca de un bálsamo para sus heridas, y no tardó mucho en abrir una distancia de un bote respecto a Orio, Donibane y Tirán. Sorprendentemente fue Orio el primero en caer y descolgarse de la cabeza de regata ante la potencia desplegada por los «Txos», y los guipuzcoanos empezaron a perder segundos con una facilidad a la que no nos tenían acostumbrados. Los vizcainos se crecieron al ver que la cuadrilla de Joxean Olaskoaga no terminaba de encontrar una bogada estable y apretaron los dientes de tal forma que se quedaron a cinco segundos de romper el récord que ostentaba Castro, todo ello en un día en el que el viento no ofrecía las condiciones ideales.

Los hombres que ocuparon las tostas de la «Bou Bizkaia» fueron los siguientes: Zulaika, Zabala, Colunga, Viudez, Montenegro, Rua, Millares, Polo, Astelarra, Pazos, Portularrume, Albizu y el patrón Arego.

La otra cara de la moneda fue para Orio. Los guipuzcoanos firmaron la peor regata de lo que llevamos de campeonato y terminaron tirando por la borda de la «Mirotza» el colchón de puntos con los que arrancaban el ecuador de la liga. Los aguiluchos se vieron relegados a la cola de la tanda nada más realizar la primera ciaboga y vieron impotentes como desaparecían las estelas de San Juan y Tiran. Los pasaitarras, después de un fin de semana aciago en casa, completaron una regata redonda y tras duelos ajustados con los gallegos terminaron en segunda posición.

En tercera posición acabó Pedreña. Los cántabros, esta vez, dieron la de cal y fueron dueños y señores de una segunda tanda que parecía más bien una revancha del campeonato regional. Ante tantas cuentas pendientes por cerrar desde el pasado miércoles, destacó la actuación de San Pedro por la calle 4 quien, sin embargo, pagó caro los tres segundos de penalización que le fueron impuestos por adelantarse en la salida. Nada más ni menos que dos posiciones que perdió en detrimento de Orio y un mejorado Kaiku.

Las mejores traineras del cantábrico se volverán a batir en un nuevo duelo (12.00 etb-1) con la disputa de la décima prueba puntuable, la XXV Bandera de Zumaia.

Gipuzkoa, líder

El retorno de la trainera fémina de Getaria-Tolosa a la liga Euskotren tuvo como resultado una nueva exhibición de la selección guipuzcoana, que sumó su tercera victoria de la temporada y regresa en solitario al primer puesto de la tabla clasificatoria.

La trainera de Getaria-Tolosa salió con hambre de triunfo, después de su ausencia en la doble cita disputada en aguas gallegas, y apenas bogadas las primeras paladas se situó en la proa de cabeza con una renta de un bote. En una regata a dos largos entrar primeras a la única ciaboga supone un duro golpe a los rivales y sabedores de ello las chicas guipuzcoanas apretaron hasta rondar una ventaja de 5 segundos. A partir de ese momento se limitaron a dosificar la ventaja obtenida, mientras que las gallegas, segundas a 10 segundos, se vieron incapaces de contrarrestar el ritmo. Bizkaia terminó en tercer lugar a 37 segundos y Cantabria fue última a más de un minuto. Hoy nueva cita en aguas de Zumaia a partir de las 11.30.

Getxoko XXXII. ikurriña