Grecia recibirá hoy las últimas recomendaciones para sus reformas por parte de la Unión Europea (UE), del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM), con convocatorias de huelga de los sindicatos.

El ministro de finanzas,Yorgos Papakonstatinu será el que explique en rueda de prensa la decisión tomada por los tres organismos, aclarando lo que le espera a Grecia en los próximos meses, informó Efe.

A pesar de que los expertos de la UE están satisfechos por el progreso de las medidas tomadas hasta ahora, su interés ha cambiado. Esta vez se centra en medidas para combatir la inflación, recortar más el gasto público y aumentar la competitividad de la economía.

800.000 funcionarios

Una de las preocupaciones del Gobierno es el gasto público. Por eso, ha realizado un censo para determinar con exactitud el número de funcionarios públicos. El resultado asciende a más de 800.000 personas.

A consecuencia de esta cantidad y para reducir el gasto público, se prevén despidos, fusiones entre entidades públicas y traslados de empleados a otros organismos del Estado.

El Gobierno ya ha reducido los sueldos un 7%, además de eliminar las pagas extras de verano y fin de año del sector público y de las pensiones.

Para la UE y el FMI, lo que más urge es la liberalización y privatización parcial del sector energético. Hasta ahora, este sector ha estado monopolizado por el organismo público DEI.

El Gobierno del PASOK afirma que no se plantea eliminar la gestión pública de centrales eléctricas. Pero el sindicato de este sector ha amenazado con movilizaciones en agosto para dejar «a oscuras» a todo el país, si se fijan medidas que mermen las condiciones laborales de los trabajadores.

Según filtraciones a la prensa griega, la UE, el FMI y el BM exigen del país helénico más liberalizaciones en su economía e importantes privatizaciones en el sector energético. A cambio de ésto, Grecia podrá recibir el segundo tramo, de 9.000 millones de euros de ayuda internacional concedida este año para estabilizar su economía.

Los expertos internacionales insisten también en que se mantenga abierta la posibilidad de nuevas recomendaciones en la seguridad social.

También les inquieta el aumento de la inflación hasta el 4% y la lentitud con la que se recaudan los impuestos.

La deuda acumulada es otro de los problemas de Grecia. Por municipios, la deuda supera los 1.700 millones de euros, siendo Atenas y El Pireo los que más acumulan.