El Gobierno de Lakua hizo entrega ayer de los restos de Primitivo Fernández de Labastida a sus familiares. El equipo de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, que colabora desde el año 2003 en un plan de investigación de las personas asesinadas durante el golpe de estado del 36 y el franquismo, exhumó los restos de este desaparecido en una fosa común de Araba.

Los trabajos de recuperación fueron llevados a cabo en una pequeña fosa situada en la cuneta de la carretera A-2622 a la altura del puerto de La Tejera. En dicho yacimiento, especialistas y voluntarios de Aranzadi, rescataron los restos de tres personas adultas, dos varones y una mujer.

La excavación tuvo lugar los días 19 y 20 de junio con previa notificación a los familiares, que habían cursado una solicitud en la dirección de Derechos Humanos de Lakua.

El equipo de Aranzadi, dirigido por Francisco Etxeberría, profesor titular de Medicina Forense de la Universidad del País Vasco, trasladó los restos humanos encontrados al laboratorio de Antropología Forense de la UPV, donde se realizó un estudio antropológico.

En la fosa, de dos metros por cuarenta centímetros, pudieron hallar varias monedas, una peineta, suelas de caucho negro de alpargatas, corchetes y otros enseres.

Primitivo Fernández de Labastida desapareció el 3 de septiembre de 1936, cuando tenía 35 años de edad. Según fuentes cercanas al desaparecido, fue fusilado junto a sus dos compañeros, presuntamente el matrimonio formado por Florentino G.V y Mónica B. del V. Sus ejecutores fueron un grupo de requetés que previamente les habían secuestrado. En concreto, Primitivo Fernández era un labrador de la localidad de Santa Gadea del Cid.