VUELTA Jornada de descanso
Igor Antón custodia el maillot rojo
Tras el primer día de parón, la carrera se sumerge a partir de hoy en una segunda semana donde se concentra casi toda la alta montaña.
Imanol CARRILLO
El pelotón de la Vuelta tuvo un buen día para descansar y retomar fuerzas antes de comenzar una segunda semana que puede ser clave para las aspiraciones de los líderes de la carrera. Además, Igor Antón y su equipo, Euskaltel Euskadi, aprovecharon la jornada para custodiar el tan ansiado maillot de líder, algo que intentarán, sin duda, hasta la última etapa.
Con una clasificación general para nada decidida aún, el primer descanso de la Vuelta tuvo un sabor vasco y, por qué no, vizcaino, tras la victoria del domingo de David López y el liderato de Igor Antón, quien repitió en más de una ocasión aquello de «¡Que me quiten lo `bailao'» en la rueda de prensa ofrecida en la localidad tarraconense de Altafulla.
El corredor de Galdakao le dio más importancia a su buen estado de forma que a las dos semanas de carrera que restan para finalizar.
Su mayor preocupación es la de «mantener las buenas sensaciones» que ha encontrado en una carrera que «no venía a ganar, ni mucho menos», pero en la que está dispuesto a «seguir haciéndolo bien» en las etapas de alta montaña, que comenzarán a partir de hoy en Andorra y «sacar diferencias también» a sus rivales si es capaz.
El mayor rival de Antón en la general, el catalán Joaquim Rodríguez, declaró que «me da pena no haber llegado de rojo a Catalunya. Ya dije que venía a por todas y en buena forma, y de momento se va cumpliendo. Llegar a casa con mi gente de rojo era importante para mí, pero no ha sido posible. En Xorret, creí que lo había conseguido, pero por aquel segundo me quedé chafado».
De ahí que el corredor de Katusha intentase rascar algún segundo en los últimos metros de la novena etapa con final en Alcoi, pero el líder se le pegó a rueda, alejando toda opción de perder el maillot rojo.
Hoy, el temido Rat Penat
La carrera retoma la marcha con los 175,7 kilómetros entre Tarragona y Vilanova i la Geltrú, y con el temido Rat Penat de por medio, un puerto corto, con rampas de hasta el 23%, si bien, sólo se subirá durante 4,4 kilómetros y el porcentaje máximo que alcanzará será del 18%.
Esta etapa da paso a una segunda semana dura y clave, ya que se concentra casi toda la alta montaña y cuenta hasta con cuatro llegadas en alto; las de Pal, Peña Cabarga, Lagos de Covadonga y Cotobello.
El corredor alemán John Degenkolb se adjudicó al sprint la primera etapa del Tour del Porvenir disputada entre las localidades de Vierzon y Saint Amand-Montrond, de 144 kilómetros, mientras que el estadounidense Taylor Phinney logró conservar el maillot de líder. Mikel Landa entró en el puesto 12 (es 82º en la general, a 1.05 del líder) y el otro vasco participante, Ion Izagirre, logró la 21ª posición (37º, a 45 segundos del primero).
La iglesia de San Miguel Arcángel de Gasteiz acogió ayer por la tarde un multitudinario y emotivo funeral para despedir a Txema González, masajista del equipo ciclista Sky fallecido el pasado viernes en Sevilla por una infección bacteriana. Estuvieron presentes ciclistas profesionales y ex corredores que compartieron con González sus años como masajista en Euskaltel-Euskadi, Saunier Duval, Fuji-Servetto o el Sky británico.