ESK también llama a la huelga el día 29 en contra de «las reformas del Gobierno Zapatero y en contra de las políticas impulsadas por los gobiernos de Madrid, Iruñea y Gasteiz, que pretenden hacer pagar la crisis a las clases populares». En una nota de prensa, esta central considera que es una manera de expresar el rechazo «al diálogo social impulsado por gobiernos y patronales» y manifiesta su «crítica radical» a la política impulsada por CCOO y UGT; «una política de diálogo y pacto social que sólo ha servido para dar aire a las políticas gubernamentales y envalentonar a la patronal».

ESK puntualiza, por otro lado, que llamar a la huelga general no significa «ruptura» con la mayoría sindical. «La unidad de acción con ELA y LAB, STEE-EILAS, EHNE e Hiru tiene un valor y un alcance superior a este hecho puntual». De esta manera rechazan las interpretaciones en algunos medios.