El Aviron perdió el liderato en el campo del Stade Toulosain, pero los entrenados por Gajan y Lievremont ofrecieron una muy buena imagen y dejaron claro que este año pueden estar entre los seis primeros al término de la Liga regular

El choque fue bonito y entretenido entre dos conjuntos que van a estar arriba, aunque iniciaron la temporada con objetivos diferentes. Los locales siempre son candidatos al título, mientras que el Aviron, tras lograr la permanencia en los despachos, inició la temporada con el objetivo de mantener la categoría, aunque ahora mismo está claro que las miras tienen que ser diferentes.

El partido comenzó bien para los labortanos. Pese a que Skrela adelantó a los locales en el minuto 6 al transformar un golpe de castigo, los blanquiazules se vinieron arriba, y un minuto más tarde ya mandaban en el marcador por 3-7, tras anotar un ensayo Pietersen, que transformó Audy. El encuentro estuvo muy nivelado, pero la clave estuvo en los diez últimos minutos de la primera parte, cuando los locales sumaron dos ensayos transformados.

Eso hizo mucho daño a los vascos, pero tras la vuelta de vestuarios volvieron a hacer frente a unos de lo gigantes de la Liga y a punto estuvieron de dar la sorpresa, ya que los aficionados locales nunca tuvieron clara la victoria de los suyos.

Con esta derrota, el Aviron pierde el primer puesto, pero seguirá pisando los talones del Stade y lo que es mejor, dando sensaciones muy buenas. Ya se ha enfrentado a varios de los equipos llamados a estar en los puestos más altos de la tabla y hasta ahora no han demostrado tener mejor equipo que los de Baiona, que si todo sigue igual puede hacer vibrar a sus muchos seguidores.