Izaskun Garikano, secretaria general de la federación de servicios públicos Gizalan de ELA y Xabier Irastorza, responsable de Enseñanza de ELA, denunciaron ayer, en rueda de prensa que el Gobierno de Patxi López «aprovecha la coartada de la crisis para destruir empleo público y privatizar servicios». Para ambos, tras el recorte salarial que aplicó el Gobierno autonómico a los empleados públicos, una nueva instrucción plantea «la destrucción de plazas» y la «no cobertura de sustituciones de menos de seis meses».

Para los representantes sindicales, el ataque contra los servicios públicos está liderado por el lehendakari Patxi López. «Pese a que su consejero de Economía pregona que Euskadi ha salido ya de la recesión, Patxi López ha decidido someterse escrupulosamente a los mandatos del Gobierno español y continuar con las políticas de recorte que, en este momento, se dirigen a destruir empleo y debilitar los servicios que se prestan desde lo público».

Según adelantaron ayer Garikano e Irastorza, la instrucción de la Dirección de Función Pública para la reducción del gasto de personal establece que «no se autorizarán sustituciones inferiores a seis meses en los casos de incapacidad temporal, permisos y licencias retribuidas. En los centros docentes se sustituirá a partir del quinto día laborable, siempre que la carga de trabajo lo justifique». Tampoco se realizarán contrataciones por acumulación de tareas; se «amortizarán» las tareas «prescindibles» y «con carácter general la instrucción indica que se van a destruir todas las vacantes producidas durante 2010 por jubilación o fallecimiento». El Gobierno de Lakua «suspende la creación de nuevas plazas» y se producirá un replanteamiento de las vacaciones y las tareas generadas por ausencias «deberán ser asumidas por el resto del personal». Incluso, como denunció ELA, «los permisos quedan, según la instrucción, supeditados a las necesidades de servicio».

La central sindical sostiene que en Osakidetza tendrá un efecto negativo, lo mismo que en la Educación Pública y en Justicia. «En todos los casos se va a resentir el servicio público. La calidad está en entredicho. Durante años hemos manifestado nuestra preocupación porque la misma se sustentaba en el esfuerzo de los empleados, ahora se agravará esa situación»