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JUAN BENGOETXEA, Médico

«Txikia» vive

Histórica. Algunas democracias occidentales «procedimentales» postulan que todas las ideas son defendibles y posibles de alcanzar, incluidas las que supondrían la desaparición del propio sistema democrático. Argumentan que, «al encauzar las demandas de los movimientos revolucionarios hacia la participación electoral, los desincentivan, obligándoles indirectamente a acostumbrarse a la dinámica electoral y su tendencia a la moderación». El poder no tiene un pelo de tonto. Francia y España no tienen un sistema democrático abierto, sino limitado por sus constituciones. Y en ambos casos la unidad indivisible y el idioma fundamental no son discutibles. Son axiomas absolutos. Patriotismo constitucional con el que se estrelló Ibarretxe. Las brunetes mediática y judicial tienen detrás como garantía a la de Atapuerca con Tejero de imaginaria. ¿Qué pinta en ese juego político con cartas marcadas un partido abertzale de izquierdas? Política revolucionaria. Política y revolución, ¿son compatibles? Las grandes cuestiones no se deciden hablando, negociando, con votos, «sino con sangre y hierro». Bismarck. Dicho de otra forma, ¿qué es lo que se pretende al sentarse a dialogar con interlocutores que ponen encima de la mesa sus constituciones inviolables y los cañones de su ejército, que defienden como verdad de certeza absoluta que Euskal Herria no existe, que el pueblo que habla la lingua navarrorum es un invento subversivo de mentes calenturientas y que no hay más voluntad democrática que las que así determinen los pueblos francés y español en sus respectivos Le Parlament y Las Cortes Generales? Si la independencia de Nafarroa viene de la mano del PNV o de la Virgen de Lourdes, bienvenida sea. Los independentistas se caracterizan porque buscan de una manera activa la liberación de Nafarroa, cada uno como puede, sin personalismos ni partidismos.

Climaterio. En medicina, llaman clímax al punto de máxima intensidad de una enfermedad (crisis). Los ingleses también relacionan el término con el orgasmo, mientras que los alemanes lo identifican con la menopausia. Los griegos sostenían que cada siete años más o menos había lo que ahora entenderíamos por cambio celular total, cambio de piel. Un punto álgido, de inflexión. Un cambio en el escalón vital. Hace 50 años en el primer escalón, en el inicio de la guerra de guerrilla urbana, murieron jóvenes, como los héroes griegos, por la igualdad y la independencia. Todo parece indicar que estamos en un nuevo climaterio. El poder, el mundo del dinero, hace crecer sus beneficios y los del mundo del trabajo disminuyen. Unos adelgazan porque otros engordan. Los sindicatos, ¿qué son? ¿Y el marxismo de salón? Una joya de coleccionista. Chomsky decía hace años que de diez dólares, nueve son pura especulación. No existen. Y, por otra parte, los del PP y PSOE viven en la mentira de los principios fundamentales del movimiento fascista. Como los banqueros, utilizan el córtex, la razón, y manipulan los sentimientos. Han decidido separar a ETA de Batasuna, en realidad del MLNV o, diciéndolo con claridad, de los independentistas. Ya dicen que los independentistas son ETA para justificar su desmesura. Lo que buscan es acabar con el independentismo y utilizan a ETA como excusa. Hace 50 años Krutwig escribía: «¿Qué reacción se podría pedir en justicia a un pueblo que es expoliado y explotado por una nación como España cuya filosofía es la zanganería y cuya casta feudal sigue viviendo de ideales del Medio Evo? ¿O de un país como Francia, que aún sueña en reencarnaciones a lo Juana de Arco?». ¿Acaso no pueden preguntarse qué problema económico, social, cultural, de orden público... podría derivarse de un reconocimiento del pueblo navarro, del derecho de autodeterminación de Euskal Herria y de su participación en Europa como pueblo libre? La Martinique y Ceuta. Imperialismo y colonialismo. 2010 es fecha de descolonización de la ONU. Siguen igual en fondo y forma. No quieren entender ni razonar que no nos sentimos franceses y españoles, les da igual. Deciden sus parlamentos que son mayoría, y ésa es la ley.

Bélica. Era de esperar que quieran modificar las ideas de los prisioneros. Cambiar la conducta. En las guerras siempre ha sido, y es, el lavado de cerebro del enemigo y la psique-borroka tan importante como la acción armada. Están escritas las instrucciones en cualquier manual. «En primer lugar el manipulador aísla a su víctima y la aleja de sus seres queridos y de su entorno, controlando lo que la víctima ve, oye y piensa, o dice. Con ello la identidad del sujeto se ve debilitada y aprovechando los momentos de debilidad de la víctima le crea incertidumbre, estrés... Hace dudar a la víctima de sus ideas». Todo ello reiteradamente, con paciencia, palo y zanahoria, durante años. Sólo tienen a sus familiares y amigos y su cohesión interna. De ahí que quieran ahogar los movimientos de solidaridad con la coartada de la venganza de las víctimas. El acoso salió de las cárceles a Gestoras primero, luego a los familiares y finalmente a todo lo vasco reivindicativo. Sin espacios de impunidad. Manipular la transmisión de conocimientos en las escuelas. Olvidemos la democracia hasta acabar con los separatistas. Estado de excepción. Sólo para navarros. Hace mucho tiempo que quieren condicionar presos e independencia. «Si amnistía, no independencia». Y ciertamente están ligados desde el principio. Hablan de arrepentimiento cuando son personas con un proyecto vital madurado que siguen cumpliendo entre rejas. ¿Acaso Jose Luis y Pablo no han demostrado que buscan la independencia de Nafarroa siempre por medios pacíficos? La honestidad intelectual de los políticos de la izquierda abertzale y su diferencia con los capones que hacen el caldo a Madrid y meten la mano en la caja es evidente. «Vamos a olvidarnos de los derechos humanos porque son alimañas». «Vamos a olvidarnos de momento de la justicia imparcial porque son terroristas». Y así han ido olvidando los derechos a la salud, al estudio, a la alimentación, al control del castigo físico, a los derechos humanos y, como los separatistas son ETA, olvidan el derecho de manifestación, opinión, reunión, etc. hasta hacer un esperpento de democracia en España. Y Francia, que lo demostró con Argelia, lo hará con los navarros si lo considera útil. No es nuevo. La justicia ha justificado y aplaudido hasta tal punto las tesis de Skinner que han reducido los derechos de las personas a lo que ocurre en Sanghai o en Guantánamo. Quieren el abrazo de Bergara, la rendición de Breda, la conquista de Granada. No han cambiado. Quieren la foto.

Política. Renovar ilusiones como la maravillosa Alicia. Algo hay que hacer. Siempre. El PP y el PSOE tienen el mismo cromosoma mitocondrial. Son hijos de la misma madre. Al parecer, según dicen ellos, de Isabel de Castilla, la católica. La única diferencia es el aborto y el matrimonio de homosexuales. Por lo demás, la situación es distinta de la que existía a la muerte de Franco. No hay dependencia con vascos y catalanes para hacer la Constitución. ¿Creían que no nos íbamos a atrever? Y claro que se han atrevido. Las últimas elecciones a Europa les han confirmado que pueden hacer lo que quieran. Europa no condena al Constitucional. Tienen lábel democrático para determinar que Catalunya no es nación y que Euskal Herria no existe. La France, en situación similar con los gitanos, no tiene por qué obedecer, pues es soberana con su Constitution. Bienvenidas sean mesas, conversaciones y votaciones. ¿Hay muchos partidarios de la lucha armada? No puede saberse porque no está permitido defender, ni comprender, ni justificar, ni abstenerse sobre ETA; sólo está permitido, por imperativo legal, condenarla. Las bases científicas que definió Claude Bernal siguen existiendo. Volverá a producirse el mismo efecto si persisten las causas y reaparecerá la lucha armada. Sin voluntad y respeto a la identidad de las minorías, las católicas Francia y España seguirán siendo dos imperios en decadencia. Si no somos capaces de traer a los prisioneros a Euskal Herria, ¿cómo vamos a ser capaces de conseguir la independencia? Lo saben todos. «Profundizar en estrategias conjuntas en el nacionalismo con vocación institucional (vocación=llamada, quiere decir participar en el pastel) más allá de artificiales polos soberanistas». Urkullu. Lo que no son pesetas son puñetas. No van al monte, ni a la playa. Que lo hagan los nietos. «Nadie es imprescindible, pero sí necesario». Un pueblo como el navarro que prefiere seguir en su tú por el tú y el yo por el yo, incapaz de superar métodos y diferencias y que sólo piensa en el hoy, la cuenta corriente y se autoengaña con lo práctico, la realpolitik, lo políticamente correcto, debería tener en cuenta las ideas de Txikia. ¿Qué es lo que se pretende? «Nuestra lucha no es por el poder, no nos preocupa quién lo consiga, no hay premio para los ganadores. Nuestra lucha es la independencia de Euskal Herria». «Zer egin diet etsai bezala, ainbat nazaten gaitzetsi?».

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