Los venezolanos acuden masivamente a las urnas en una jornada tranquila
Los venezolanos votaban en gran número y en calma ayer, en unas elecciones legislativas en las que el presidente, Hugo Chávez, aspira a mantener una cómoda mayoría de cara a las presidenciales de 2012, y en las que la oposición volverá al Parlamento tras cinco años de ausencia.GARA |
Los venezolanos votaron ayer en masa para renovar la unicameral Asamblea Nacional, de 165 diputados, en una jornada que auguraba una alta participación para unos comicios en los que medían sus fuerzas el presidente Hugo Chávez y la oposición.
«El pueblo está hablando y estoy seguro de que se impondrá la voz del pueblo», dijo Chávez, con aire tranquilo tras depositar su voto en un barrio popular de Caracas. El jefe de Estado se felicitó por la alta participación que, según él, podría llegar al 70% en una jornada electoral a la que fueron convocados más de 17,5 millones de venezolanos para elegir a 165 diputados de la Asamblea Nacional y que se consideraba un test de cara a las presidenciales de 2012, en las que Chávez aspira a un tercer mandato de seis años.
Desde la madrugada, el presidente estuvo muy activo, enviando decenas de mensajes en los que apelaba a «arrollar» y «demoler» a sus detractores en las urnas, ya que está en juego «el futuro de Venezuela».
Durante todo el día se vieron largas colas a las puertas de numerosos centros de votación en Caracas, incluso antes de que abrieran las oficinas de votación.
Según responsables militares y portavoces de la Comisión Electoral, la votación transcurrió con «normalidad» y sin que se registraran «incidentes mayores».
Los llamamientos a acudir a las urnas también se repitieron por boca de los antichavistas, que instaron a los electores a votar para lograr un Parlamento «plural» que luche por un país «para todos».
La oposición decidió no participar en las elecciones parlamentarias de 2005 y desde entonces, la Asamblea Nacional, ha trabajado sin obstáculos para llevar adelante el proyecto político socialista de Chávez.
Ahora, los opositores regresan al Parlamento, unidos en una coalición electoral llamada Mesa de Unidad Democrática, cuyo único objetivo es frenar el proyecto de Chávez.
El Gobierno sabe que es imposible repetir el dominio parlamentario atípico de la pasada legislatura, pero aspira a lograr dos tercios de los escaños (110) para conservar un amplio margen de maniobra. En virtud de la nueva ley electoral en vigor bastaría un 51% o 52% de los votos para dar al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) esta mayoría.
Según los sondeos, la intención de voto está muy repartida.
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo, mediada la jornada electoral, que, según las proyecciones, podría registrarse hasta cerca de un 70% de participación en los comicios parlamentarios.