La brecha entre ricos y pobres es cada vez más profunda en Estados Unidos
Estados Unidos es el país industrializado donde la diferencia de ingresos entre los más pudientes y los más necesitados es mayor, y esa brecha es además cada vez más grande, según reconoce la Oficina del Censo. El 20% más rico tuvo en 2009 la mitad de los ingresos totales.GARA | WASHINGTON
Estados Unidos cuenta con el mayor índice de desigualdad del mundo industrializado, al haberse incrementado el año pasado de nuevo la brecha de ingresos entre ricos y pobres, según cifras que ha divulgado esta semana la Oficina del Censo. Según estos datos, difundidos por Efe, el 20% de la población con los ingresos más altos, es decir los que ganan más de 100.000 dólares al año, recibió el 49,4% de todos los ingreso generados en Estados Unidos.
Los que están por debajo de la línea de pobreza, lo que se considera unos ingresos inferiores a 21.000 dólares anuales para familias de cuatro miembros, recibieron el 3,4%. Estas cifras revelan una proporción de 14,5 a 1, por encima del 13,6 a 1 del año 2008, y casi el doble de las cifras que había en el año 1968, cuando se comenzó a elaborar esta estadística. Otra medida diferente, el índice internacional Gini, señala que la desigualdad de los ingresos es ahora la mayor de la que se tiene conocimiento.
Según este índice, también facilitado por el Censo, la disparidad de ingresos en EEUU es la mayor entre los países industrializados. En el tope de la pirámide de ingresos, el 5% de la población que percibe más de 180.000 dólares anuales aumentó levemente sus ingresos el año pasado, y las familias en el nivel medio, con ingresos de 50.000 dólares anuales tuvieron un recorte.
La economía de Estados Unidos entró en recesión en diciembre de 2007 y, según la encuesta de hogares que realiza la Oficina del Censo, el ingreso real medio de los hogares bajó en un 2,9% entre 2008 y 2009, hasta 50.221 dólares anuales.
Sin embargo, en los últimos meses, concretamente a partir del segundo semestre de 2009, EEUU ha vuelto a presentar números positivos, y el jueves el Departamento de Comercio dio a conocer que su economía había crecido a una tasa anualizada del 1,7 % entre abril y junio, después de un ritmo de incremento del 3,7% en el primer trimestre del año. Y, de cara a lo que queda de ejercicio, la mayoría de los economistas calcula que el PIB marcará una tasa anualizada de crecimiento del 2,1% entre julio y diciembre.
Está por ver, en cualquier caso, si esos números macroeconómicos tienen reflejo real en las economías domésticas y en la cifra de desempleo, que se mantiene en torno al 10% desde hace más de un año.
Según el índice Gini, la disparidad de ingresos en Estados Unidos es la mayor entre los países industrializados, y es hoy en día la mayor de todos los tiempos.