Dimitri Yachvili volvió a decidir un encuentro, dándole la victoria al Biarritz en el derbi. Esta temporada los blanquirrojos han sumado muchos puntos gracias al medio melé, que después de pasar dos años muy malos se encuentra en un gran momento de forma y de juego.

La derrota de ayer puede hacer mucho daño a los de Baiona, que suma la tercera consecutiva tras un comienzo brillante, donde llegó a ocupar el primer puesto de la tabla. Está en un momento muy delicado, aunque en los tres duelos que ha perdido ha estado a un buen nivel y ayer pudo sumar un punto bonus.

El Biarritz estuvo casi siempre a remolque, pero al final, en el momento clave, supo dar la vuelta al marcador y se llevo los cuatro puntos, aunque tal vez los locales hicieran más méritos para ello. Yachvili adelantó a los del Olympique al transformar un golpe de castigo, pero Boyet dio la vuelta al marcador con dos lanzamientos a palos, para que en el minuto 28 Gerber anotara el único ensayo de los locales, que lo transformó Boyet. Antes del descanso Yachvili acortó distancias y los dos contendientes se fueron al vestuario con el marcador 13-6 a favor de los blanquiazules.

Mucha lucha

En el inicio de la segunda parte, Boyet transformó dos golpes de castigo pero en medio Yachvili anotó un ensayo que también se encargó de transformarlo, colocando el 19-13 en el marcador.

El duelo seguía estando abierto, pero ahí apareció la experiencia del Olympique y la valía de Yachvili. Un buen pateador da muchas victorias a un equipo y Yachvili hace lo mismo con el Biarritz. Dimitri fue el protagonista de los últimos 20 minutos del encuentro y él sólo se encargó de decidir el derbi, convirtiéndose en el mejor del encuentro.

Lo de Yachvili es una gran noticia para los entrenados por Jean Michel Gonzalez, pero la otra cara de la moneda es que en este primer tramo de la Liga los blanquirojos están dependiendo demasiado del medio melé, y cuando éste no juega le cuesta mucho ganar.

Pero lo que está claro es que el Biarritz viene para arriba y eso es muy importante. Serge Blanco lo dijo en la presentación de su equipo, que este año aspiraban a todo y de momento parece que ya han superado el bache que tuvieron al comienzo de la temporada.

El Aviron, por su parte, lleva el camino opuesto, aunque los malos resultados deben acabarse pronto, de lo contrario pueden surgir las dudas cuando muchos aficionados veían que esta podía ser una temporada muy grande.

Ahora la Liga tendrá un parón que durará quince días, ya que el próximo fin de semana dará comienzo la competición europea tanto para el Biarritz como para el Aviron, que jugarán la Heineken Cup y la European Challenge, respectivamente.