Miles de personas establecieron la noche del lunes un campamento cerca de El Aaiún, capital de Sahara Occidental, para protestar contra el «deterioro» de sus condiciones de vida y exigiendo «puestos de trabajo y vivienda».

Fuentes cercanas a las autoridades citadas por France Presse hablaron de 5.000 saharauis, aunque los testigos aseguran que hay más de 10.000 manifestantes.

«Las demandas sociales de estos ciudadanos son parte del clima de libertad y democracia que impera en el reino [de Marruecos]», afirmaron, en un tono que parecía adquirir tintes de sarcasmo, las autoridades que ocupan Sahara Occidental, quien se niega a permitir que los saharauis celebren una consulta para decidir sobre su futuro.