«Otegi preso y sus compañeros son un símbolo de la lucha del pueblo vasco por la democracia, por la libertad y por la autodeterminación de Euskal Herria. Su prisión es también símbolo de la represión del Estado español contra Euskal Herria». Son palabras del abogado Miguel Castells, que participó ayer en la presentación de una iniciativa internacional a favor de la puesta en libertad del político de Elgoibar.

Esta campaña nació en el transcurso de la celebración del Foro de Sao Paulo en Buenos Aires, en agosto pasado, para pedir la excarcelación del líder independentista. La iniciativa fue presentada ayer en Donostia por algunos de sus promotores; entre ellos, la abogada Doris Benegas, el escritor Carlo Frabetti, el integrante de la izquierda abertzale Tasio Erkizia, el diputado de ERC Joan Tardá, la fundadora de IU Ángeles Maestro y Diego Paredes Manot -hermano de Txiki-, además del hijo del político encarcelado, Hodei Otegi.

Benegas, tras aclarar que los impulsores de esta campaña «no son del entorno de nadie», comentó que muchos de la suscriben siguen sufriendo «la criminalización por parte de aquellos que vivían cómodamente bajo el franquismo». La abogada afirmó que Otegi es un «preso político» porque «no hay otra motivación objetiva para su encarcelamiento que el impedir que pueda trabajar a favor de sus ideas políticas».

Responsabilidad democrática

Bajo esas premisas, recabarán apoyos en todo el mundo. Así, en próximas semanas celebrarán un acto en Madrid y adelantaron que antes de que acabe el año se reunirán con partidos de izquierda europeos para que apoyen y lleven esta iniciativa al Parlamento de Estrasburgo. Y se comprometieron a seguir recogiendo apoyos «hasta que el clamor obligue al Gobierno español a poner en libertad a Otegi».

En su intervención, Benegas calificó la campaña como «pura actividad de responsabilidad democrática». «No podemos permitir que se imponga el odio que marca la extrema derecha española, responsable directa del régimen franquista y, por tanto, del mayor genocidio cometido sobre los pueblos del Estado español, a la que el PSOE se está dejando arrastrar», denunció.

Ángela Maestro, por su parte, leyó la carta donde se defiende que mantener a Arnaldo Otegi en la cárcel «pondría de manifiesto una falta de voluntad en la reconducción política del llamado conflicto vasco». Esta misiva ya ha sido suscrita por unas 600 personas; entre otros, los escritores Alfonso Sastre o Andrés Sorel, que emitieron sendas notas en las que apoyaban la causa. El premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, ex fiscal general de Estados Unidos Ramsey Clark, el dirigente de Sinn Féin Gerry Adams, personas vinculadas a partidos y movimientos de liberación de América Latina, músicos, periodistas o escritores integran la lista. También se han sumado representantes de partidos vascos y dirigentes de ERC y del BNG.

Eguiguren-Goirizelaia

Por otro lado, después de conocerse que la abogada de Arnaldo Otegi, Jone Goirizelaia, se reunió con el presidente del PSE, Jesús Eguiguren, y el periodista Gorka Landaburu, ayer José Antonio Pastor comentó que ve «con absoluta normalidad» ese encuentro.

«No habría que sacar para nada las cosas de quicio», porque, según explicó el portavoz del PSE, la reunión «no tiene otro sentido que el que tiene», aludiendo a que la abogada debe comunicar al testigo «qué quiere y qué tipo de preguntas le quiere hacer». No obstante, Pastor asumió que esta reunión puede crear «una cierta polémica», como ocurrió también «sobre la conveniencia de si Jesús Eguiguren asistía o no al juicio», cuando «es bueno recordar que tiene obligación de asistir porque está citado formalmente por los tribunales de Justicia».

Eguiguren es uno de los testigos solicitados por la defensa para el juicio que se celebrará a partir del jueves contra Otegi, Joseba Permach y Joseba Álvarez en relación al acto de presentación de la «propuesta de Anoeta».