El primero de los dos partidos de sanción del técnico Ambros Martín por la tarjeta roja que vio en Castro Urdiales lo solventaba Itxako sin problemas dirigido desde el banquillo por el segundo entrenador Manu Etayo. El 25-41 final no miente. El conjunto de Lizarra sometió al Cleba León a una paliza de las que hacen época.

No obstante, el luminoso marcaba el empate a 15 en tiempo de descanso, después de una primera mitad en la que Itxako no estuvo, ni de lejos, a su nivel. Comenzaba el partido con igualdad en el marcador, pero a medida que avanzaba, León se adelantaba con cortas ventajas. Itxako no ofrecía su mejor tono defensivo y prueba de ello es el mal resultado con el que se llegaba al descanso. Pero en la segunda mitad, el duelo daría un giro de 180 grados.

Es de suponer que la charla en los vestuarios de Etayo debió hacer efecto, porque el cambio de sus jugadoras fue radical.

En 5 minutos Itxako se marchaba de 4 goles en el marcador y el partido se rompía. León no fue capaz de adaptarse a los cambios defensivos propuestos por Etayo, que colocaba a Alexandrina Barbosa en el avanzado del 5-1, logrando robar balones y machacar a la contra.

Demoledora la segunda parte de las de Lizarra, que endosaban un parcial de 10-26, todo un ejemplo del potencial del equipo cuando la defensa funciona.

Tras asegurar otra jornada como invicto en la Liga ABF, Itxako vela armas para su próximo viaje a tierras alemanas. Ganar al Leipzig será otra historia.