Alberto Contador se mostraba ayer «contento» de que el caso que lo mantiene suspendido cautelarmente por un presunto positivo por clembuterol en el pasado Tour haya llegado a la Federación española «porque significa que ya podemos avanzar» en el proceso.

Tras recibir y estudiar el informe enviado por la Unión Ciclista Internacional (UCI) a la Federación Española de Ciclismo (RFEC), Contador mantiene su optimismo y confianza en la resolución del caso, pues el traslado del expediente era la noticia que esperaba para continuar avanzando y preparar las alegaciones para el comité de competición.

Según una nota publicada por Contador y su equipo jurídico, el informe elaborado por la UCI y la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) se centra en la hipótesis de una contaminación alimentaria.

La defensa de Contador ultima la preparación de los informes científicos encargados a distintos especialistas internacionales, así como el resto de investigaciones y consultas a organismos oficiales que se han llevado a cabo, con el objetivo de ofrecer al Comité de Disciplina Deportiva la mayor cantidad de pruebas posibles.

De vuelta cuanto antes

Al mismo tiempo se trabaja con la esperanza de que se emita un veredicto en el menor tiempo posible, con el objetivo de que Contador pueda comenzar la próxima temporada ciclista sin ningún impedimento.

El pasado 24 de agosto la UCI comunicó a Contador un positivo en el control realizado el 21 de julio en la jornada de descanso del Tour.

Contador justificó el resultado por el consumo de carne contaminada. La UCI inició una investigación junto a científicos de la AMA y el 8 de noviembre envió la documentación a la federación española para que inicie un procedimiento disciplinario.