Las representantes de la mayoría sindical vasca, conformada por ELA, LAB, STEE-EILAS, EHNE e Hiru, reivindicaron en Bilbo «una ofensiva feminista en la sociedad y en los centros de trabajo para erradicar la violencia sexista». Ana Pérez, de STEE-EILAS, indicó con preocupación que «El 70% de las mujeres en el mundo ha sufrido violencia al menos una vez en su vida» y recordó que en lo que llevamos de año son ya «seis las mujeres muertas víctimas de la violencia sexista en Euskal Herria». Por eso, reclamó la necesidad de salir a la calle mañana cuando se conmemora el Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres. Dijo que «no podemos dar un paso atrás en esta demanda» y recordó que el mundo laboral «no se escapa a esta lacra, porque se siguen reproduciendo expresiones claras y, a veces no tan nítidas, de la violencia ejercida contra las mujeres por el mero hecho de serlo».

En ese sentido, Zaloa Ibeas, por parte de LAB, lamentó que el mercado laboral no ha avanzado hacia la igualdad entre hombres y mujeres, pese a las diferentes normativas y leyes aprobadas en ese sentido. «Las instituciones y la patronal hacen discursos políticamente correctos pero no son capaces de superar esta grave discriminación y violencia sexista». A juicio de Ibeas se necesita «una modificación estructural del modelo socioeconómico y laboral» y recordó que la reforma laboral y la reforma de las pensiones «sólo provocan más precariedad entre las mujeres y más pobreza. Porque las mujeres tienen un papel secundario en el mercado laboral, lo que no nos permitirá tener unas pensiones dignas». También criticó los recortes de gasto social, puesto que «perjudican más a las mujeres», ya que son «las más necesitadas porque no tienen empleos estables y duraderos». En este sentido, Jone Bengoetxea, de ELA, reclamó «una nueva política de empleo centrada en las necesidades de las trabajadoras y trabajadores de Euskal Herria», bajo el reconocimiento y el amparo «de un marco vasco de relaciones laborales y protección social basado en la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres».

La mayoría sindical vasca además reclama «reproducción humana como asunto de interés público y la reivindicación de los derechos sexuales y reproductivos de mujeres y hombres, también en el mundo del trabajo». Exigen «un sistema justo y solidario de protección social. pensiones dignas y prestaciones sociales que garanticen una vida digna para las mujeres». Planes de igualdad «efectivos y vinculantes en los centros de trabajo», a la vez de una necesidad de cambio de «la cultura organizativa del trabajo, como medida efectiva para la corresponsabilidad».

Por otro lado, la responsable de la Secretaría de la Mujer de CCOO de Euskadi, Felisa Piedra, alertó en una rueda de prensa anterior a la de la mayoría sindical de «la muy lenta incorporación a los convenios colectivos de medidas de apoyo a las trabajadoras». Por su parte, ESK explicó que «ir eliminando todas las desigualdades entre hombres y mujeres nos acercará a la progresiva desaparición de la violencia sexista».