Los presos vascos Jon González y Mikel Almandoz han perdido ocho kilos desde que el 16 de noviembre iniciaran una huelga de hambre con el objetivo de acabar con las dificultades de comunicación que padecen en la prisión francesa de Tarascon.

Según informó el movimiento pro amnistía, el responsable de la división acudió el martes para preguntarles sobre los motivos de la huelga y, ayer, les comunicó que en breve el subdirector se reunirá con los dos vascos, que hasta esa reunión continuarán con el ayuno. Como sucede en otras prisiones, reclaman, entre otras cosas, poder tener visitas especiales con los niños, el reconocimiento del EPPK o poder tener visitas dobles de dos horas cada semana, dado que los familiares tienen que viajar 1.800 kilómetros. Además, ayer por los presos se reunieron 20 personas en Atarrabia, en solidaridad con su convecino Mikel Almandoz.

Por otro lado, varios vecinos de Zornotza partieron el sábado hasta la cárcel de Albocasser (Castelló) para mostrar su solidaridad y apoyo a su vecino Juan Jose Legorburu y al resto de presos políticos vascos.

Encarcelan a Rekarte

En paralelo, el juez de la Audiencia Nacional española Fernando Andreu ordenó ayer el ingreso en prisión del irundarra Juan Carlos Rekarte, que fue apresado anteayer en México y entregado a continuación a las autoridades españolas.