Maite SOROA
El tiempo de los sabelotodo
Ya intuía yo que de tanto darle vueltas al chocolate terminarían mareados. Me refiero al comunicado de ETA que todo el mundo sabe cuando se va a publicar y qué va a decir. Bueno, todos menos Germán Yanke, que ayer, en «Estrella Digital», dejaba sentado que «Mientras se espera un comunicado de ETA (para ya mismo o para después de Navidad, según fuentes de la llamada Izquierda Abertzale), parece que los entusiastas sugieren que se tome en consideración y, acompasados con sus `pasos', el Estado de los suyos. El asunto es más ridículo que otra cosa porque ni se sabe lo que exactamente dirá el comunicado famoso, ni se entiende qué otra cosa puede hacer el Estado y sus instituciones que cumplir y hacer cumplir la ley, algo que poco tiene que ver con lo que quiera decir la banda». O sea, que la cosa se arregla con más leña. Ya ven qué pocas ganas tienen algunos de que se arreglen las cosas.
Y el mismo día, en «La Gaceta», del grupo Intereconomía, Juan Frommknecht se las daba de enterado.
Dice Frommknecht que «Me atrevería a afirmar que dicho comunicado está ya elaborado y que no va a dejar contento a nadie. No sólo no va a declarar el fin de ETA, sino que va a pedir al Estado que dé pasos en la solución del conflicto. A cambio sí se compromete con una tregua permanente y verificable. En resumen, nueva patada adelante para que se siga hablando de una banda que en ningún caso tiene la mínima intención de entregar sus armas». Este tampoco parece un entusiasta de la normalidad política y por ello insiste en jugar a gurú: «Puestos a seguir jugando con la bolita mágica, les diría que esta vez la noticia no la va dar el Gara. Los capuchas entienden solemne el momento e intentarán de nuevo la mayor repercusión internacional para este comunicado que no supone más que una escenificación de la nada». Otro sabelotodo.
Pero para justificarse, agrega un dato que no sé yo si será cierto: «hasta aquí lo que les puedo contar. Tal vez me equivoque, tal vez no. El tiempo dará y quitará razones, pero les recuerdo humildemente que en 2007 fui el primero en publicar que ETA iba a romper su tregua». Por si acaso se cubre. La verdad es que son graciosos.