Después de un camino tortuoso, el Caja Laboral Baskonia afronta el último partido de la liguilla de la primera fase de la Euroliga como un trámite. Los de Dusko Ivanovic esperan dar a su afición una alegría ante un Partizan de Belgrado que pierde muchos enteros cuando juega lejos del Pionir y que, como su rival, también pasará al Top 16. Por ende, no se juega nada y es más que posible que se pueda dejar ir en caso de que se le tuerza el partido.

De uno modo u otro, podría decirse que el conjunto local se enfrenta más a sí mismo que al Partizan. Por un lado, puede pasar a la siguiente fase como segundo del grupo A, siempre y cuando se imponga con una ventaja igual o superior a los 4 puntos y que el Khimki diga adiós a la Euroliga derrotando en su feudo al Zalgiris.

La innegable irregularidad de los de Ivanovic -el duelo de Belgrado fue paradigmático, ya que la escuadra baskonista desperdició una ventaja de más de 10 puntos para acabar perdiendo por 74-71-, con la derrota sufrida en la Liga ACB el sábado pasado frente al Real Madrid como otro botón de muestra, hace que los gasteiztarras traten de congraciarse con su afición.

Según Dusko Ivanovic, estos altibajos deben servir para que su equipo «madure un poquito. No podemos repetir estos errores a partir de ahora, ni en la Liga ACB y sobre todo en la Euroliga, ya que van a ser partidos mucho más serios, contra equipos de altísimo nivel, la élite en Europa».

El técnico del Caja Laboral Baskonia esperaba que en el partido final de la fase regular de la Euroliga ante Partizan de Belgrado sus hombres jueguen «tranquilos, serios y con paciencia» en cada acción.

Sobre la clasificación de su equipo, Ivanovic se limitó a señalar que «el principal objetivo de este equipo es acabar cuanto más arriba le sea posible» y declaró que espera «no tener que depender del sorteo» del Top 16.

Haislip, «mala suerte»

Por otro lado, se mostró resignado por la nueva lesión sufrida por Marcus Haislip en este arranque de temporada. El de Bijelo Polje achacó a la «mala suerte» el rosario de contratiempos que impide al ala-pívot estadounidense ofrecer lo mejor de su juego.

«No ha tenido ninguna suerte con las lesiones desde que vino. Esperemos que a partir de que se recupere de esta nueva lesión pueda continuar sin mayores problemas. Este partido es importante, pero al menos no decisivo», se consoló.

Por ello, y visto las buenas prestaciones que ofreció en su debut frente al Real Madrid, es de suponer que Pape Sow tendrá una buena ración de minutos en su estreno en la Euroliga. El pívot senegalés dará descanso a Barac y Teletovic, mientras que el joven Dejan Musli, que en principio no jugará, volverá a la convocatoria tras perderse el duelo del sábado pasado ante el Real Madrid por decisión de su técnico.