La lucha de los deportistas vascos por conseguir la oficialidad de las selecciones ha encontrado un nuevo apoyo. Concretamente, el de un grupo de personas estrechamente ligadas al mundo del fútbol, que ayer mostraron su disposición a colaborar con esa tarea.

La puesta de largo de este «primer paso» se realizó ayer en Donostia, donde parte de los firmantes hizo público su manifiesto de apoyo a los jugadores, así como su declaración de intenciones. Leído por el ex presidente de la Real Sociedad Iñaki Alkiza y el mítico jugador del Athletic José Luis Artetxe, y suscrito por José María Arrate, Ramón Aznar, Txabi Gauna, Inaxio Kortabarria, Juan Mari Lasa y Leo Barañano, el manifiesto elogiaba, en primer lugar, la decisión tomada por los futbolistas. «Queremos aplaudir la decisión de los jugadores de jugar el partido con la selección, a pesar de no haber rubricado acuerdo alguno con los responsables de la Federación. Ha sido una decisión merecedora de elogio, correcta y audaz», subrayaron.

Los impulsores no se quedan ahí y dan respuesta a una de las solicitudes realizadas por los futbolistas. Hace un mes, cuando anunciaron su decisión de volver a enfundarse la elástica de la selección, reconocieron que «con todo el camino que queda por recorrer, los jugadores no nos vemos capaces de hacer todo el camino en solitario».

De ahí que hicieran un llamamiento a la sociedad en general y, particularmente, «a quienes puedan aportar su granito de arena en este ámbito». La respuesta llegaba ayer, con ese manifiesto en el que se mostraba «total receptividad a la llamada de los jugadores para impulsar entre todos los estamentos implicados la consecución de la ansiada oficialidad. A tal fin, ofertamos nuestra humilde colaboración, en el convencimiento de que, en la tarea de lograr la oficialidad de las selecciones vascas, no sobra nadie».

De ahí que también agradezcan cuantas aportaciones sean posibles, ya que «a pesar de que la reivindicación de la oficialidad, además de legítima, es compartida por la gran mayoría de la ciudadanía vasca, somos conscientes de que su logro no es tarea fácil. Por lo que la aportación de todos siempre ha de ser bienvenida», insistieron.

Sin confrontación

Precisamente por ese mismo motivo, desde este grupo se quiso dejar especialmente claro que «no buscamos ni queremos ningún tipo de confrontación. Entendemos que éste no es un camino fácil y tampoco lo es para la propia Federación. No queremos confrontaciones», insistieron los firmantes, entre los que, de hecho, se encontraban antiguos miembros del órgano federativo.

Admitieron, además, que esta puesta de largo es «un primer paso». En el futuro, confían en encontrar más apoyos entre personalidades igualmente vinculadas al fútbol y, a muy corto plazo, ponerse manos a la obra. «Primero queremos que se juegue el partido y, después, que se haga todo con cierto orden».

Es decir, ponerse a trabajar «a partir del 30 para que no vuelva a pasar que el año que viene llegue octubre y estemos en la misma situación. Tenemos un año por delante», explicaron los firmantes, convencidos de que «de aquí en adelante hay que trabajar de otra manera».