«Nuestra posición natural está entre el séptimo y el noveno»
Entrenador del San Antonio
Llegó como recurso de urgencia y se ha convertido en el artífice de todo un éxito inesperado para la parroquia albiazul, liderando un equipo repleto de juventud y ganas de triunfar. Cumplida la primera vuelta liguera, su cuarto puesto hace de Juanto Apezetxea la revelación de la temporada en su debut como técnico de la Asobal.
Natxo MATXIN
Rebosa optimismo y ambición, cualidades que ha sabido transmitir a sus pupilos para que éstos firmen hasta ahora una campaña que sólo puede ser calificada como de excepcional. Con su fichaje por el San Antonio, Juanto Apezetxea ha demostrado que apostar por lo de casa también tiene premio en momentos en los que otros conjuntos navarros pujan por lo contrario.
Con el corazón en la mano, ¿pensaba que su equipo iba a estar en la cuarta posición acabada la primera vuelta liguera?
Realmente ha sido una sorpresa para todos porque el club partía con la mitad del presupuesto del año pasado y, aunque se consiguió repescar a Ristanovic, se habían producido nueve bajas sensibles, de los jugadores con más caché. La apuesta era arriesgada, con mucha gente joven, algunos de ellos con poca experiencia incluso en División de Honor B y con el objetivo de intentar mantenernos sin grandes penurias.
Y la fórmula se ha mostrado de lo más gratificante, por números e imagen ofrecida hasta ahora.
Es la consecuencia de meterte en una dinámica fruto de la inercia que te dan los resultados. Ha habido dos puntos de inflexión muy importantes que han marcado nuestra trayectoria. El día en que ganamos fuera al Alcobendas y cuando nos dimos cuenta que podíamos tutear a los grandes, con la impresión muy buena, pese a perder, en el partido contra el Barcelona y al ganarle al Ademar León en nuestra pista.
Habla de puntos de inflexión, pero ¿cuáles son las claves del éxito del actual San Antonio?
Pues hay varias. Para empezar, que se ha conseguido generar un grupo humano muy bueno, con un perfil de jugadores muy parecido. Es gente que se lleva bien, que coinciden en sus ratos de ocio, que salen a cenar juntos... y eso se manifiesta en los entrenamientos y en la cancha. Por otro lado, son gente joven, con unas ganas terribles de triunfar, que este año tienen un rol diferente, pues disponen de más minutos y los están aprovechando. Finalmente, tienen una calidad y valía incuestionable. En función de la velocidad con que vayan madurando, estoy convencido de que muchos de ellos van a acabar jugando en equipos grandes.
Y de todos ellos, ¿cuál es el que más le ha sorprendido por su inesperado rendimiento?
No me gusta mucho hablar a nivel individual, pero está claro que en boca de todos está el papel de Niko Mindegia, aunque yo ya lo tenía muy bien valorado, al igual que a otros compañeros que ahora parecen haber sorprendido a los aficionados por su nivel. Quizás las mayores incógnitas radicaban en los extranjeros y, sobre todo en los dos laterales izquierdos, por su desconocimiento de la Asobal y del idioma, pero se están adaptando muy bien. Puestos a destacar, pondría el acento en el papel de Gedeón Guardiola y Arkaitz Vargas, que se están comportando como jabatos en el centro de la defensa. Somos el quinto mejor equipo en este apartado y eso es un dato muy positivo para una escuadra tan joven como la nuestra.
¿Y se va a mantener ese nivel, tanto físico como táctico, además de concentración, para el segundo tramo de la temporada?
Va a resultar una tarea muy complicada porque se trata de dinámicas ganadoras que nunca sabes cuándo van a finalizar. Hay casos de equipos, recuerdo por ejemplo la Real Sociedad que en la 2002-03 estuvo a punto de ganar de nuevo la Liga y luego ya hemos visto lo que le ha costado retornar a Primera. Repetir la trayectoria última no será nada fácil.
¿El parón liguero a causa del Mundial viene bien o frena un momento dulce?
Pues es un poco de ambas cosas. Lo cierto es que necesitábamos descansar, pero también nos encontrábamos en un punto de forma muy bueno. Lo veremos a partir de febrero.
El retorno a la competición oficial se presenta francamente duro, con enfrentamientos ante rivales teóricamente superiores.
La segunda vuelta tiene un inicio muy difícil. Recibimos en los dos primeros encuentros caseros al Valladolid y al Granollers, que está por encima nuestra, y debemos rendir visita a la difícil cancha de un Cuenca que está físicamente muy fuerte. Ojalá sigamos con esta línea de regularidad, pero para ello tendremos que ponernos las pilas muy rápido.
Y a ello hay que unir torneo europeo y Copa.
Sí, pero son competiciones distintas, en las que te la juegas a un partido. Con un poco de suerte, podemos tener nuestras opciones de ir pasando eliminatorias y, quién sabe, quizás plantarnos por lo menos en semifinales de alguna de ellas. Una vez ahí, cualquier cosa puede pasar.
Por si fuera poco, los rivales ya están avisados del potencial del San Antonio. ¿Afectará la pérdida de ese factor sorpresa?
Todo el mundo, incluidos otros entrenadores con los que he hablado, nos colocaba en la mitad de la tabla, entre un séptimo y un noveno puesto. Sinceramente, creo que esa es nuestra posición natural porque ha habido factores favorables como enfrentamientos directos entre los grandes o equipos a los que les ha afectado en Liga tener que jugar también la Champions, caso del Valladolid.
¿Sigue siendo el objetivo la permanencia o hay que ponerse metas más elevadas?
Con sólo media liga, la salvación ya está conseguida porque creo que el listón estará en una horquilla entre los 17-18 puntos y nosotros ya tenemos 21. Ahora es momento de plantearnos nuevos retos, de ver si somos capaces de aguantar ahí arriba, entre los mejores.
Da la sensación de que considera que su escuadra tiene todavía mucho que ofrecer.
Es cierto que tiene margen para progresar, pero no nos engañemos, también carencias. De momento hemos conseguido superar algunos episodios de lesio- nes con el sobreesfuerzo del resto, pero no sabemos qué puede ocurrir si llegan contratiempos con algunos de nuestros hombres claves.