el gobierno español aprueba las nuevas tarifas para 2011
El recibo de la luz subirá en enero el 9,8%, y el gas, el 3,9 %
El Gobierno español aprobó ayer la tercera subida del recibo de la luz de este año, al dar el visto bueno al incremento medio del 9,8% de la Tarifa de Último Recurso. El incremento se suma al 2,64% aprobado el pasado enero, al 4,8% de julio y a los dos puntos más con que se grava el IVA de la tarifa eléctrica. Además, el nuevo año se iniciará con un recibo del gas un 3,9% más caro de media.
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La tarifa eléctrica de último recurso (TUR), a la que están acogidos unos 17 millones de hogares y pymes en el Estado español, subirá una media del 9,8% a partir del próximo 1 de enero, tras el visto bueno de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos a la propuesta de subida planteada por el Ministerio de Industria.
Se trata de la mayor subida porcentual desde que se inició la liberalización del sector eléctrico en 1997. La TUR, que se revisa trimestralmente, es desde julio de 2009 la única tarifa eléctrica que aprueba el Gobierno.
A ella pueden acogerse los abonados con potencias contratadas iguales o inferiores a los 10 kilovatios (27 millones), que, no obstante, también pueden optar por contratar su suministro en el mercado libre.
La subida de la luz no afectará a los titulares del bono social, que está congelado y del que pueden beneficiarse los usuarios con potencias inferiores a los 3 kilovatios, así como los hogares con todos sus miembros en paro, las familias numerosas y quienes perciban pensiones mínimas. El Gobierno calcula que pueden acogerse al bono social unos cinco millones de usuarios, aunque actualmente lo disfrutan unos tres millones, según datos de la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
Desglose de la subida
La TUR se compone de los peajes eléctricos (55 %), que remuneran los costes regulados del sistema (como transporte, distribución o primas a las renovables), y del coste de la energía (45%), cuya evolución depende en gran parte del resultado de unas subastas para el suministro a tarifa (CESUR).
El secretario de Estado de Energía, Pedro Marín, detalló que de esta subida, cuatro puntos corresponden a la subida de las materias primas; tres puntos a los cambios de hábitos de consumo, con más peso de las horas punta (donde la energía es más cara) frente a las horas valle; y tres puntos más por el coste de poner en marcha el Real Decreto que prima el consumo de carbón nacional.
Para la revisión de enero, el Ejecutivo ha decido congelar los peajes, mientras que, según el sector, el coste energético se ha disparado un 16% por la subida de los precios fijados por subasta (entre el 1,8% y el 4,3%), el aumento del consumo en las horas más caras por la llegada del invierno (que encarece la energía un 9%) y el sobrecoste de determinados servicios (3%).
A todo ello hay que añadirle, según las eléctricas, otro 3% por el aumento en un 72% de los pagos por capacidad para hacer frente a los incentivos al consumo de carbón nacional. En 2010, la luz ha subido ya en otras dos ocasiones: el 2,64% en enero y el 4,8% en octubre, en tanto que en julio el Gobierno pactó con el PP congelar la tarifa para buscar un pacto en materia energética que no se concretó. Además, hay que añadir el encarecimiento a consecuencia de que el IVA aplicable a la tarifa eléctrica pasó del 16% al 18%. La subida encarecerá el recibo de la luz una media de 3,2 euros al mes y de 38,4 euros al año, según explicó el secretario de Estado de Energía, Pedro Marín.
También sube el gas
Por otro lado, la tarifa de último recurso (TUR) de gas subirá un 3,9% de media a partir del 1 de enero de 2011, según avanzó el secretario de Estado de Energía. Según explicó Marín, la tarifa denominada TUR 1, la que no incluye tener calefacción con gas, subirá un 4,14%, lo que supone 0,56 euros mensuales de media por cada hogar. Para la denominada TUR 2, para hogares con calefacción de gas, la subida será del 3,87% y supondrá 1,66 euros al mes. A esta tarifas están acogidos unos siete millones de hogares.
La subida del gas se aprobó también ayer por la Comisión Delegada de Asuntos Económicos, que no trató el precio del butano.
Unesa, la patronal del sector eléctrico, considera que la subida de la tarifa eléctrica de último recurso (TUR) en un 9,8% a partir del 1 de enero resulta indispensable para lograr el objetivo de eliminar el déficit tarifario (diferencia entre los ingresos y los costes del sistema) en 2013. Fuentes de Unesa recalcaron que los precios de la energía «deben responder a los costes reales», lo que, en su opinión, explica la constante subida de la tarifa eléctrica.
Según la patronal eléctrica, sin la subida aprobada ayer por el Gobierno español no sería posible eliminar en el plazo previsto el déficit tarifario, que, según calculan las empresas eléctrica, sumará más de 20.000 millones de euros al cierre del presente ejercicio. Las fuentes de Unesa subrayaron que «hay que seguir en esta senda» para resolver el problema del déficit de tarifa. De hecho, el Gobierno español cree que, pese al incremento de la TUR, el sector seguirá generando el denominado «déficit de tarifa», que se produce desde hace una década porque los ingresos obtenidos a través del recibo de la luz no cubren todos los costes que soporta el sistema.
Con este argumento, el Consejo de Ministros aprobó el pasado jueves una serie de medidas entre las que destacan el establecimiento de un peaje por el uso de las redes a las empresas generadoras de 0,5 euros por megavatio hora y el recorte en un 30 % de las horas con derecho a prima a las instalaciones fotovoltaicas. En este último caso, el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno navarro, Álvaro Miranda, afirmó ayer que la medida afectará a más de 8.500 familias y pequeños inversores propietarios de instalaciones solares fotovoltaicas en Nafarroa, que van a perder, cerca de 35 millones de euros y hará perder otros once a la Hacienda foral. GARA
«Intolerable», «muy grave», o «brutal tarifazo» fueron algunos calificativos de las asociaciones de consumidores del Estado español al conocer la la subida de la tarifa eléctrica. En declaraciones a Efe, el portavoz de CECU, David Hurtado, opinó que el incremento es «intolerable» y está «fuera de todo lugar» porque perjudica los intereses de los consumidores, que en estos años no han recibido «ni mejoras en el servicio ni una buena atención al cliente», y llega «en el peor momento posible«.
El director general de la OCU, José María Múgica, calificó la medida de «muy grave» y recordó que desde 2008 el incremento ha sido del 35,7%. Múgica indicó que nadie aclaró cuáles eran los costes de transición a la competencia, que hace años sirvieron para justificar un aumento del recibo de la luz, y, ahora, nadie explica cuál es el alcance del déficit tarifario que se va a compensar con el actual incremento. También expresó su temor de que no se trate de la única subida en los próximos doce meses y recordó que desde la página en internet de la organización se recogen firmas de consumidores «hartos de que suban la luz», con las que en los próximos días pedirán al Gobierno la congelación de las tarifas. Por parte de la CEACCU, Yolanda Quintana, indicó que el incremento, es «muy grave» e inasumible para los consumidores. «Estamos sorprendidos porque se han cumplido los peores augurios. El Gobierno ha concedido sus deseos a los operadores eléctricos.Quieren obligarnos a que nos salgamos de la tarifa eléctrica de último recurso y estemos en el mercado libre», añadió Quintana.
La FUCI calcula que la subida supondrá unos 50 euros más al año para un usuario medio, lo que cree «inaceptable al favorecer los intereses de las compañías eléctricas en vez del de unos consumidores que no están viendo los beneficios que iba a traer la liberalización energética». Facua-Consumidores en Acción advirtió de que el incremento puede ser muy superior al 9,8% anunciado, en función del nivel de consumo de las familias. Tras calificarla como «brutal tarifazo», Facua reclamó transparencia y lamentó que el Gobierno «en plena crisis económica castigue la economía de las familias para satisfacer los intereses del sector energético» porque, a su juicio, esta subida responde a un «pacto del oligopolio vigente». Finalmente, la UCE consideró «inaceptable» el incremento e insistió en la necesidad de un modelo «estable» de regulación de la tarifa eléctrica. GARA
