CRíTICA cine
«The Green Hornet » El justiciero desenfrenado
Koldo LANDALUZE
Nacido en los míticos seriales radiofónicos de la década de los 30, “The Green Hornet” dio el salto a la pequeña pantalla y logró un considerable éxito de audiencia que propició su lógica prolongación en la pequeña y gran pantalla. En este apartado cabe destacar la iconográfica propuesta sesentera en la que Van Williams encarnaba a Britt Reid/Green Hornet y el mítico Bruce Lee hacia lo propio con su compañero de andanzas, el resolutivo y siempre fiel Kato. En este su primer coqueteo con las producciones comerciales hollywoodenses, el francés Michel Gondry no ha querido arriesgarse y se ha decantado por llevar a buen puerto un proyecto de encargo impulsado por el gesticulante Seth Rogen, quien, además de protagonizar el rol principal, ha ejercido funciones de guionista y productor.
Después de la sorpresa y curiosidad inicial que suponía ver al autor de películas tan personales como “¡Olvídate de mi!” o “Rebobine, por favor” en un trabajo de estas características, descubrimos que esta renovada adaptación de las andanzas protagonizadas por el justiciero enmascarado que imaginó el dúo George W. Trendle-Frank Striker –creadores del no menos legendario “El llanero solitario”– no es más que un producto de consumo rápido al que Gondry ha querido dotar de cierto empaque autoril cuando las circunstancias visuales así lo requerían. Tampoco una historia tan modesta y sencilla en su planteamiento argumental hubiese sido merecedora de un tratamiento excesivamente «profundo» por que, quizás, el resultado hubiese sido catastrófico. Por ese motivo, lo que aquí prima es la comedia y la parodia, la exaltación del antihéroe circunstancial y la explosión de adrenalina en 3-D. Poco más cabe decir de un filme en el que destacan, sobre todo, la interpretación que el taiwanés Jay Chow llevá a cabo de Kato o la presencia de un Christoph Waltz que vuelve a recuperar su vis cómica tras su demoledora caracterización en la tarantiniana “Malditos bastardos”.