La definición de las alianzas electorales en Nafarroa se ha convertido en un culebrón que entra en su fase definitiva con un movimiento muy marcado: Aralar, PNV y el grupo de Uxue Barkos se retrataron ayer juntos para confirmar que concurrirán como Nafarroa Bai y para presentar por escrito un documento de veto a la izquierda abertzale, que lleva meses proponiendo una alianza amplia que pueda competir con UPN por el liderazgo electoral. Los tres socios exigen ahora a EA que rompa los compromisos con «Batasuna» -así es como se le denomina- en el herrialde.

En la rueda de prensa, Patxi Zabaleta, coordinador de Aralar, puso énfasis en afirmar varias veces que «nuestro adversario es la derecha, no nos equivocamos en eso». Sin embargo, el documento presentado como «Compromiso público de los miembros de Nafarroa Bai ante las próximas elecciones de mayo» -que se reproduce íntegramente en la página siguiente- no alude para nada a UPN y PP, y sí, en sus tres párrafos, a la izquierda abertzale.

El texto entregado a los medios, además, incluye a EA entre los partidos «componentes», lo que quiere decir que se trata de un documento ya cerrado que se le presenta para su firma. En vista de todo ello, antes de la rueda de prensa la Ejecutiva Nacional del partido que preside Pello Urizar avisó de que las nuevas «condiciones» que se le tratan de imponer sean debatidas y votadas el martes en la Asamblea Nacional del partido. Y que, por tanto, no participaría en la comparecencia.

¿Condiciones o «garantías»?

Estas nuevas exigencias fueron presentadas por Aralar, PNV y Barkos el miércoles, apenas unas horas después de que EA hubiera reiterado su disposición a estar en la fotografía de ayer y hubiera asumido incluso dar la cabeza de lista de Iruñea a Uxue Barkos, contra el criterio de la dirección nacional.

Desde sectores de EA, el documento se entiende como un intento de humillación y de condicionar su acción política, cuando es sabido que EA tiene un acuerdo estratégico nacional con la izquierda abertzale y otro político que incluye también a Alternatiba. Por contra, Zabaleta y Barkos argumentan que se trata sólo de «garantías» y el primero llegó a decir que «la sociedad nos las está reclamando».

En cualquier caso, fue patente la sensación de preocupación de los comparecientes, con la excepción de José Angel Agirrebengoa, presidente del PNV en Nafarroa, que se mostró más satisfecho ante los medios. En un momento dado, se dio a entender que EA no había avisado siquiera de su ausencia. Cuando se le pidió que confirmara si era así, Patxi Zabaleta lo negó: «El contacto lo mantenemos por tierra, mar y aire, día y noche». Fue prácticamente el único momento distendido en una rueda de prensa de caras largas.

Tanto Barkos como Zabaleta tuvieron que responder a varias cuestiones peliagudas. Se les recordó, por ejemplo, que se había afirmado que quien no estuviera ayer «en la foto» tampoco estaría en Nafarroa Bai para las elecciones. Lo dijo Txentxo Jiménez, coordinador de Aralar en Nafarroa y protagonista de las principales escaladas verbales contra la izquierda abertzale y EA; ayer Jiménez no se sentó en la mesa sino entre el público, en otro gesto significativo. Barkos intentó quitar hierro al tema: «No era un ultimátum. Una coalición es algo trabajoso, y en los últimos meses ha habido momentos de zozobra. Pero ésta no es, ni mucho menos, una fecha de fotografía estanca».

A continuación se les planteó que efectivamente las cosas han cambiado tras las nuevas exigencias planteadas a EA, ante lo que Zabaleta respondió que «el texto es nuevo, pero no contiene condiciones nuevas. Se ha puesto así para que no haya dudas». Según su tesis, «Nafarroa Bai tiene que ofrecer garantías y seguridades».

En la misma línea, el líder de Aralar sostuvo que demandas del documento como «dejar sin valor los diferentes acuerdos suscritos con Batasuna» deben entenderse sólo como «una exigencia social. No significan coartar la libertad de nadie para tener otro tipo de acuerdos».

«Empezar sin cerrar nada»

Finalmente no se produjo ninguna firma, a la espera de lo que decida la Asamblea Nacional de EA. Y en consecuencia, los participantes intentaron quitar importancia al acto: «No era un ultimátum, sólo era la fecha que nos habíamos dado», afirmó Uxue Barkos de entrada. Zabaleta apostilló que «Nafarroa Bai ya es, tiene que ser, será la opción que garantice el cambio».

Dado lo peculiar del acto, quedaron más preguntas en el aire. La última dirigida a Barkos fue si ahora empezarán a preparar listas: «Comenzamos a trabajar, pero no quiere decir que se vaya a preparar nada. Podemos empezar sin cerrar nada».

«Compromiso» exigido por Aralar, PNV e «independientes» a EA

«Aralar, EA y EAJ-PNV, como partidos componentes de Nafarroa Bai, y con ellos los independientes abajo firmantes, manifiestan de forma clara que ante la legislatura 2011-2015, para el Parlamento navarro y ayuntamientos su apuesta en Navarra se centra exclusivamente en NaBai como agente para el cambio y, por lo tanto, que ninguno de los otros compromisos que cualesquiera de ellos hubiera podido adquirir con terceros tienen ámbito de intervención en Navarra o vocación de interferir en el desarrollo de los compromisos suscritos con Nafarroa Bai.

Todo esto deja manifiestamente sin valor, en lo referente a Navarra y para el periodo señalado, lo recogido en los diferentes acuerdos suscritos con Batasuna.

En consecuencia, los firmantes de esta declaración adquieren el compromiso de mantener un comportamiento leal en lo referente a no proceder a nuevas declaraciones, escenificaciones conjuntas o compromisos con Batasuna, que tengan Navarra como escenario, o puedan ser entendidos como un cuestionamiento o interferencia en los compromisos con NaBai».

Propuesta programática de la izquierda abertzale a NaBai para 2011-2015

1. Compromiso con el impulso y la articulación de Euskal Herria. «Partiendo de la actual realidad jurídico política (...) nos comprometemos en dichos ámbitos a posibiltar el ejercicio efectivo de los derechos nacionales de la ciudadanía vasca».

2. Impulsar el cambio político y social. «Que permita (...) generar un cambio político, económico, social, cultural e institucional sustancial»

3. Pacificación y normalización de Euskal Herria. «El `Acuerdo para un escenario de paz y soluciones políticas' [Gernika] es el marco de referencia para generar un escenario de no violencia».

4. Reconocimiento del derecho de decisión de la ciudadanía navarra. «Todos los proyectos políticos (...) deben poder ser defendidos».

5. Garantizar la oficialidad del euskara. «El euskara es la lengua nacional del país y elemento de identidad propia de Nafarroa».

6. Profundización democrática y reconocimiento de los derechos civiles y políticos sin limitaciones.

7. Es necesario otro modelo económico y social más justo, transparente, equitativo, solidario y democrático. «Apostamos por el fortalecimiento del sector público como motor del desarrollo económico y social, la reforma individual del sistema impositivo».

8. Fortalecer el sistema de servicios públicos. «Avanzar en la consecución de la justicia social que corrija las desigualdades».

9. Impulsar políticas que corrijan los graves desequilibrios territoriales.

10. Impulsar la democracia participativa. «Superar los déficits democráticos del actual marco jurídico-político».

11. Garantizar jurídica y socialmente el derecho de las mujeres a realizar su proyecto de vida en libertad e igualdad de oportunidades.

12. La juventud. «Defendemos el derecho de la juventud a opinar y tomar decisiones de forma autónoma»

13. Apuesta solidaria entre los pueblos y personas del planeta. «Progreso verdaderamente sostenible, solidario (...) e igualitario con los pueblos empobrecidos.

14. Optimizar el respaldo social de los abertzales de izquierdas y progresistas de Nafarroa.