UPN pretende dejar atado en Eguesibar un plan de 30.000 nuevas viviendas en vísperas electorales
Las administraciones en manos de UPN proyectan convertir Iruñerria en una inmensa urbe. Primero fue el proyecto de Gendulain para construir 20.000 viviendas, y ahora el Ayuntamiento de Eguesibar quiere edificar otras 30.000, pese a que en la comarca hay ya 15.300 viviendas vacías.
Iñaki VIGOR
El Ayuntamiento de Eguesibar se formó en 2007 por 9 concejales de UPN, 3 de NaBai y 1 de PSN. Esta mayoría absoluta permitió al partido regionalista aprobar inicialmente, en mayo de 2010, un plan que contempla la construcción de 30.000 nuevas viviendas en el valle. Al plan se presentaron un total de 65 alegaciones, pero no ha sido admitida ni una sola de las suscritas por los concejos que integran Eguesibar ni tampoco por diversas asociaciones vecinales.
El pasado 4 de enero el Ayuntamiento aprobó provisionalmente el plan, y ahora se está a la espera de la aprobación definitiva por parte del Departamento de Ordenación del Territorio del Gobierno de Nafarroa.
Este plan fue aprobado por una Corporación elegida hace cuatro años, cuando Eguesibar contaba con unos 7.000 habitantes. En este tiempo la población ha ascendido hasta 16.200 habitantes, y de hecho se ha convertido en el quinto mayor municipio de Nafarroa, por detrás de Iruñea, Tutera, Barañain y Burlata. Es decir, el actual Ayuntamiento representa a menos de la mitad de los actuales vecinos, y pretende que se apruebe un plan que va a condicionar el futuro de todo el valle cuando sólo faltan tres meses para renovar la Corporación municipal.
Para hacer frente a este desmesurado proyecto, se ha constituido la plataforma «Salvemos Eguesibar Zain Dezagun», integrada por representantes de los concejos de Ardanatz, Badostain, Egues, Elia, Ibiriku y Olatz, y apoyada por las asociaciones Ibia, Iturberri y Urbi, diversas formaciones políticas y sindicales y vecinos a título personal.
«Es de sentido común, de ética y de estética que este plan no se apruebe en vísperas de las elecciones municipales, y que se espere a la formación de una nueva Corporación que represente a la actual población del valle. No es de recibo que ahora tengan tanta prisa para dejar zanjado un plan antes de las elecciones», comenta Ramón Contreras, vocal del Concejo de Olatz y uno de los portavoces de la plataforma.
Contreras recuerda que este plan urbanístico se viene gestando desde hace cuatro años, y que el actual Ayuntamiento no ha incentivado el debate y la participación ciudadana sobre el mismo, máxime cuando se trata de un plan de 30.000 nuevas viviendas que «no responden a ninguna necesidad de este valle, ni de la comarca ni de Navarra».
A su juicio, este proyecto se ha elaborado «al margen de la realidad social y de crisis que estamos viviendo, sin tener en cuenta que en estos momentos no se construye nada, no se vende nada y no existe una demanda real de viviendas».
Debido a la magnitud del plan, la plataforma vecinal surgida en Eguesibar no duda de que supondría «una agresión» a las condiciones de vida de todo el valle y condicionaría para siempre su futuro. «Si ahora, con 16.200 habitantes, existen problemas de infraestructuras, de viales, de comunicación, de transporte y tantos otros, con 60.000 personas más esto sería inimaginable. Es una auténtica barbaridad, un auténtico disparate», resume Ramón Contreras en nombre de la plataforma.
Junto a ello, advierte de que tendría un impacto ecológico y medioambiental «brutal» para el valle. «Supondría la desaparición de pueblos enteros, la desaparición de la huella ecológica e histórica de núcleos como Ibiriku, Alzuza y Badostain, que queda- rían irreconocibles y sumergidos en una vorágine de edificios, en medio de una construcción masiva», añadió el vocal del Concejo de Olatz.
Esta apreciación es ratificada por Alberto Mendilazo, presidente del Concejo de Ibiriku, donde se contempla la construcción de 800 nuevas viviendas en un pueblo que ahora tiene 50 casas y varias de ellas vacías. «En diez años no se ha construido ninguna vivienda, porque no hay demanda o porque la demanda que hay se reconduce de otras formas», explica.
«El plan tiene ideología»
La plataforma también advierte que este plan «no es algo aséptico, sino que tiene una ideología claramente definida: la ideología del ladrillo, del desarrollismo, del capitalismo, de la especulación, de la ocupación masiva del suelo, del consumo energético exagerado, de condicionar el futuro para las próximas generaciones, es decir, la misma ideología que nos ha llegado a la situación de crisis mundial que estamos padeciendo».
Por todo ello, exige la paralización de este plan y defiende que sea la nueva Corporación la que impulse un debate social para que sean los propios vecinos quienes decidan. «Esta es una labor que la tenía que haber realizado el actual Ayuntamiento, pero no la ha hecho», lamentan los miembros de la plataforma.
En Eguesibar hay en estos momentos tantas viviendas como habitantes (16.200), y se estima que el 30% de todas ellas se encuentran vacías.
La plataforma «Salvemos Eguesibar zain dezagun» se dio a conocer ayer en un acto realizado junto al nuevo Ayuntamiento del valle, construido en Sarriguren. Ha puesto en marcha el blog www.planurbanisticoegues.blogspot.com y ha activado un correo electrónico (salvemoseguesibar@gmail.com) para informar a los vecinos y recabar sus aportaciones.
También ha iniciado una recogida de firmas por todos los pueblos del valle para exigir que se paralice el plan de UPN, que serán entregadas al propio Ayuntamiento, al Defensor del Pueblo y al Parlamento. En próximas fechas habrá un acto festivo-reivindicativo. I. V.