JUICIO POR EL ESCÁNDALO EN LA HACIENDA VIZCAINA
Bilbao y Bergara justifican que Ibarra siguiera en su cargo de subdirector
José Luis Bilbao y Josu Bergara fueron ayer testigos de la defensa del principal imputado del escándalo en la Hacienda vizcaina, Juan Ramón Ibarra. Ambos justificaron que el ex subdirector de la Inspección Fiscal siguiera más de un año en su cargo, tras conocerse la actuación de la Fiscalía Anticorrupción. Bilbao afirmó que la Diputación se retiró de la acusación porque «nuestros abogados dijeron que no había delitos». La sospecha de un acuerdo se extiende ya.
Juanjo BASTERRA | BILBO
El actual diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, y el anterior, Josu Bergara, declararon como testigos de la defensa del principal imputado en el escándalo de la Hacienda vizcaina, Juan Ramón Ibarra, para exculparle de haber mantenido un trato de favor a 209 empresarios a cambio de recompensas económicas por un valor mínimo de 327.000 euros, como figura en la acusación de la Fiscalía, y para justificar su presencia en el mismo cargo más de un año después de que se destapara el escándalo.
El ex subdirector de la Inspección se enfrenta a una petición de la Fiscalía de 11 años de cárcel y una multa de 800.000 euros por supuestos delitos continuados de falsificación e infidelidad en la custodia de documentos, cohecho, prevaricación y desobediencia a sus superiores.
Las intervenciones de Bilbao y Bergara, lejos de disipar las dudas sobre lo que ocurrió en la Hacienda de Bizkaia, han abierto otras razonables de que la Diputación de Bizkaia ha llegado a algún tipo de acuerdo con el principal imputado para evitar que el hilo de esta madeja pudiera desentrañar actuaciones irregulares o de trato de favor a determinados contribuyentes por su poder económico, entre otras muchas razones.
José Luis Bilbao, que se definió como «un humilde economista de Sarriko», dijo desconocer, a preguntas de la fiscal, que el equipo de abogados que contrató la Diputación de Bizkaia para personarse en la causa trató desde el primer momento de que se sobreseyeran las actuaciones. Al frente de ese equipo de abogados estuvieron Mario Fernández y el ex magistrado Carlos Bueren. Al actual presidente de BBK le sustituyó su esposa, Arantza Estefanía.
Un día antes de que la Diputación de Bizkaia decidiera abandonar la causa, en marzo del año pasado, Bueren y Estefanía manifestaron en un informe, sin esperar a las conclusiones finales de la Fiscalía, que los cinco supuestos delitos «no eran tales. Nos retiramos y mantenemos expresa reserva en las acciones administrativas», precisó José Luis Bilbao.
El diputado general reconoció que el ex diputado de Hacienda Javier Urizarbarrena, el actual, José María Iruarrizaga, y el ex director de Hacienda Javier Muguruza podrían haber actuado para evitar que Juan Ramón Ibarra siguiera en ese puesto de subdirector si las relaciones, como explicó el propio Muguruza, hubiesen sido tensas. Como recordó el ex director en su comparecencia hace diez días, Ibarra le ocultó la información que le pidió de los supuestos beneficiarios por parte de la Inspección Fiscal. Incluso, una vez que se descubrió en octubre de 2002, le entregó un listado sin la presencia de 23 protegidos.
José Luis Bilbao manifestó desconocer esas situaciones, a pesar de que la Hacienda de Bizkaia es uno de los departamentos más importantes del entramado foral.
Sin embargo, el diputado general justificó que Juan Ramón Ibarra estuviera en su cargo de subdirector de la Inspección Fiscal durante más de un año desde que saltara el escándalo, a pesar de que algunos testigos han asegurado que las actuaciones del acusado habrían permitido cometer un fraude a la Hacienda vizcaina por un valor de 4,6 millones de euros, por el impago de determinadas cantidades por parte de los empresarios privilegiados.
El actual diputado general afirmó que el cese de Ibarra como subdirector de la Inspección se produjo en febrero de 2004 y que se le adscribió a otro puesto, aunque él y los otros tres acusados tienen abierto un expediente que se resolverá cuando finalice la tramitación penal actual.
El ex diputado genera Josu Bergara, que estuvo en su cargo hasta junio de 2003 y vivió de forma directa el inicio del escándalo, confirmó que Juan Ramón Ibarra estaba en ese cargo de subdirector desde 1989. Señaló que «sólo podía ser cesado por orden del Diputado de Hacienda» y confirmó, igual que José Luis Bilbao, que no tuvo, en sus ocho años como diputado general, «ninguna queja de Ibarra», ni tampoco de sus jefes inmediatos, tanto Javier Urizarbarrena -ex diputado de Hacienda- como Javier Muguruza -ex director de Hacienda-.
A una pregunta de la fiscal sobre si le informaron de la irrupción de la Fiscalía Anticorrupción en las oficinas de la Hacienda de Bizkaia, Bergara manifestó que «me informaron del hecho. No me dijeron los motivos, aunque supe que había algún problema en la Inspección. En esas fechas entrábamos en la campaña electoral» y «no recuerdo que me dieran información de nada más». J. B.