Bengoa considera que la industria tabaquera «manipula» al consumidor
El consejero de Sanidad de la CAV se mostró convencido de que los «txokos» se autorregularán respecto a la ley antitabaco y que los cambios en ese ámbito se irán aceptando «de manera natural».GARA | BILBO
El consejero de Sanidad del Gobierno de Lakua, Rafael Bengoa, manifestó que los txokos se autorregularán al igual que lo están haciendo las sociedades. Además, consideró que la industria tabaquera ha generado «la mayor manipulación de todos los tiempos» al crear debate respecto a la actual ley antitabaco.
Bengoa participó en la presentación del balance de 2010 del área del Consumo en Bilbo, y dejó constancia de su opinión sobre la polémica que se ha creado en torno a la aplicación de la nueva ley en los txokos al ser preguntado al respecto.
El consejero aclaró que los txokos que estén sometidos a la ley de Asociaciones tienen que respetar lo que se acoge en ella, y al ser un espacio cerrado debe acatar la prohibición de fumar en su interior. En cambio, explicó, que los espacios «más pequeños» de uso privado no se verán afectados por la normativa. Se mostró optimista al declarar que los txokos «aceptarán los cambios de manera natural» y que se autorregularán al igual que las sociedades.
Por otro lado, lamentó que los que se están quejando ahora por los pasos que está dando la ley antitabaco no lo han hecho durante los últimos 40 años en los que la industria del tabaco ha llevado a cabo la «mayor manipulación del consumidor que ha habido en la historia».
En su opinión la industria tabaquera ha mantenido, durante todo ese tiempo, sustancias adictivas en sus productos aun sabiendo que producen daño y han hecho que los fumadores «se sintieran seguros de que no era nocivo».
Anunció que la Consejería tiene previsto hacer públicos la semana que viene los datos recogidos por el Observatorio de Seguimiento de la ley del Tabaco, aunque avanzó que en la CAV se han registrado «pocos procesos de quejas formales». Además, Bengoa destacó que la normativa «ayudará a que mucha gente» deje de fumar.
60 sustancias cancerígenas
El consejero recordó que los cigarrillos están compuestos por 4.000 productos, de los cuales 60 son cancerígenos. Subrayó que la Agencia de Información sobre Ambiente y la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer, entre otros organismos, clasifican «el humo pasivo como un cancerígeno del grupo A», y que por eso la administración ha tomado medidas.
Del mismo modo, informó de que «la concentración química» de las sustancias cancerígenas que afectan a los fumadores pasivos es de cuatro a seis veces mayor en un txoko o bar que en los despachos, donde hace tiempo que se prohibió fumar. Por ello aclaró que la actual ley antitabaco legisla «algo que es peor en términos de su potencial dañino que de lo que fue en lugares de trabajo».