Yemen vivió ayer manifestaciones masivas que querían ser «el comienzo del fin» del régimen del presidente Ali Abdallah Saleh. En dos de ellas, en la sureña Adén, se registraron incidentes con un saldo de un muerto y nueve heridos por disparos de la Policía.

En la capital, los organizadores afirmaron haber reunido a 100.000 manifestantes para una oración colectiva ante la Universidad de Sana'a, donde los estudiantes están acampados para reclamar la caída del régimen.

El imam Abbdallah Saatar afirmó en su sermón que «la caída del régimen es la única salida a la situación actual». «¡Márchate! ¡Márchate!», respondieron los manifestantes dirigiéndose al presidente Saleh, rechazando cualquier posibilidad de diálogo.